Oro líquido

17 mar 2019 / 11:22 H.

El olivo llegó a España con los fenicios hacia el año 1.050 a.C. pero fueron los romanos los que llenaron la península ibérica de olivos convirtiéndola en uno de los principales exportadores de aceite. Su importancia fue tal que el emperador Adriano acuñó monedas con un ramo de olivo y la leyenda: Hispania. España tiene el 75% de la producción mundial y este año más de lo previsto y la provincia de Jaén produce más aceite que Grecia e Italia juntos. Nuestro paisaje, economía y gastronomía son deudores del olivar. Hasta aquí todo perfecto pero, ¿qué pasa con el precio? Este año disminuye la producción mundial, aumenta la de Jaén y el precio está ya casi rozando las pérdidas. Se habla de almacenamiento para poder elevar el precio, pero ¿quién mueve el hilo para que el oro líquido no repercuta en una de las provincias más devastadas según los últimos informes del BBVA? ¿Qué pasa con Jaén? Las almazaras se han modernizado y actualizado conforme a las nuevas tecnologías, se ha desarrollado la investigación de las variedades de aceitunas y aceites pero... ese dinero no llega a Jaén. ¿Dónde se queda el dinero de un negocio tan millonario y milenario, tan universal y saludable? Aceite de Jaén, ya está bien de tanto particularismo y abrir mercados nuevos. ¡Qué listos han sido los italianos! ¿no les parece?