Ahora la economía
El gobierno de España, que acaba de tomar posesión la pasada semana, tiene ante sí importantes retos que afrontar en el ámbito económico. La primera tarea no ha de ser otra que la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2024. Es ésta la norma más importante que cada año se aprueba por las Cortes Generales. Su relevancia viene dada porque es el instrumento mediante el cual los poderes públicos intervienen en la actividad económica por medio de la hacienda pública (impuestos y gasto público). En condiciones normales el Proyecto de Ley de Presupuestos se suele formular en Consejo de Ministros durante el mes de octubre, destinándose los meses de noviembre y diciembre a su tramitación parlamentaria (Congreso y Senado), de modo que estén aprobados antes de la finalización del año y entren en vigor el día 1 de enero. De no ser así, los vigentes en el ejercicio en curso quedarían automáticamente prorrogados. Es evidente que no hay tiempo material para tener unos nuevos PGE antes del 31 de diciembre, por lo que se habrá de partir con los actualmente en vigor durante 2023. A este respecto, la Comisión Europea ya ha instado al gobierno de España a que elabore y apruebe cuanto antes las cuentas públicas definitivas de 2024, advirtiéndole de que la situación fiscal española es muy complicada, dados los altos niveles del déficit y de la deuda pública.
Aquí está otro de los desafíos que tiene por delante el nuevo gobierno, el desequilibrio financiero del sector público. En efecto, según las previsiones de la propia Comisión Europea, España cerrará 2023 con un déficit público equivalente al 4,1 por 100 del PIB, por encima de la media de la Unión Europea (3,2) o de Alemania (2,2), aunque mejor que Francia (4,8) o Italia (5,3). Por lo que se refiere a la deuda pública viva —aún no amortizada—, la situación tampoco es muy halagüeña, ya que según la oficina estadística de la UE —Eurostat—, al finalizar el segundo trimestre de 2023, el saldo de la deuda española se situaba en el 111,2 por 100 de nuestro PIB, muy por encima de la media de la UE (83,1), aunque por debajo de Grecia (166,5), Italia (142,4) o Francia (111,9 por 100). En suma, la situación de las cuentas públicas españolas requiere ajustes en el corto y medio plazo, como también habrán de afrontarlas otros países de Europa que están aún peor que nosotros. España cuenta con la ventaja de que nuestra economía aún sigue creciendo a un ritmo vigoroso. Así, la Comisión prevé que se cierre 2023 con un incremento del PIB del 2,4 por 100, frente al 1,3 de media en la UE, el 1 por 100 en Francia, el 0,7 de Italia o el -0,3 de Alemania. En 2024 nuestra economía crecerá un 1,7 por 100, más que la media europea (1,3), como también superará a Alemania (0,8), Italia (0,9) y Francia (1,2 por 100). No cabe duda de que el reequilibrio de las cuentas públicas es otro de los grandes desafíos del nuevo gobierno.
La financiación de las Comunidades Autónomas sigue pendiente, ya que la norma vigente, la Ley Orgánica 3/2009, de 18 de diciembre, está completamente obsoleta y requiere de una actualización urgente para reparar la infrafinanciación a que se está sometiendo a algunas Comunidades, entre otras a Andalucía. Es evidente que todo se complicará con el acuerdo de condonar una parte de la deuda a Cataluña, siempre y cuando no se haga de forma equitativa con todas las Comunidades Autónomas.
La reducción de la jornada laboral desde las actuales 40 horas semanales hasta 38,5 en 2024 y 37,5 en 2025, la subida del Salario Mínimo Interprofesional o del Ingreso Mínimo Vital, así como la reforma del Estatuto de los Trabajadores, serán temas que constituirán verdaderos desafíos inminentes. Como así lo será la prórroga de los impuestos a la banca, las eléctricas o las grandes fortunas. Además de todo ello se deberán materializar las transferencias comprometidas al País Vasco —gestión económica de la Seguridad Social— y a Cataluña -Servicio Ferroviario de Cercanías/Rodalies-. Desde luego vamos a estar entretenidos y yo, desde esta columna de Diario JAÉN, trataré de poner “la economía al alcance de todos”.