A vosotros, ladrones

03 oct 2018 / 11:43 H.

El ser políticamente correctos hace que nos quedemos a medias con lo que pensamos y sentimos. Si el tema es de poca envergadura, la verdad es que no tiene la mayor importancia; sin embargo, cuando se trata de robar vidas, no hay medias tintas que valgan. No comprenderé jamás ni creo que nadie en su sano juicio lo haga, que haya quien se crea dueño y señor de la vida de nadie y esto es lo que llevamos viendo desgraciadamente en los tiempos que corren y que creemos tan avanzados. Los ladrones no tienen explicación, ni excusa ni perdón. Han privado a quienes se suponía que debían querer y proteger, no solo de la vida, sino de sueños, de esperanza, de futuro, de risas, de compañeros de colegio y de tantas cosas que les estarían esperando en el camino que tenían derecho a recorrer. Y en ese mismo camino se quedaron las Primeras Comuniones, los estudios, las bodas y formar su propia familia. ¿Qué sienten estos semidioses de pacotilla? ¿Cómo se explica que el resentimiento hacia otra persona, que es la madre de esos hijos, los lleve a cometer semejante atrocidad? De todo corazón, les deseo larga vida, pero que no descansen. Sin corrección.