25N, un
año más

27 nov 2017 / 09:49 H.

Un año más nos toca recordar a esas mujeres que perdieron su vida por amor, por enamorarse y vivir su relación desde la educación que les ha brindado una sociedad heteropatriarcal que nos machaca, nos hunde y nos asesina. Porque a golpes no nos morimos, sino que nos matan. Dejemos los eufemismos a un lado y recordemos que es la sociedad, los altos cargos, los poderes políticos y judiciales, cualquier ámbito en el que nos queramos reflejar como comunidad, quienes nos asesinan. Permiten que las mujeres sigamos siendo ninguneadas y pisoteadas. Consienten que la mujer siga siendo un mero objeto y un pepele que hay que moldear a gusto del consumidor.

Este año me veo en la obligación de recordar, una vez más, que no solo nos matan a golpes, a tiros, a puñaladas, sino que nos asesinan con cada discriminación que se nos dedica, con cada publicidad donde se nos estereotipa o con cada “personaje” humano que pone en tela de juicio acto de una mujer, con cada micromachismo. Este año hay que gritar, además, que no es no. Que la vida de las mujeres es una vida real y que nos queremos vivas y dignas.