Manos a la brocha por la ciudad

El artista Ramón Figueroa vuelve a embellecer el municipio con sus obras

15 oct 2018 / 11:56 H.

Hace unos meses, el trabajo de este artista ya saltaba a la palestra con sus peculiares farolas instaladas en las puertas de los colegio Sixto Sigler y San Marcos bajo el título “Me voy... tengo prisa”, a las que se sumaban anteriores trabajos como “Abuelo”, otra de sus farolas que se encuentra en la plaza de la Constitución o las obras “La Palmera” o “El Viajero” en las inmediaciones de la estación de autobuses de la ciudad.

Ramón Figueroa, desde el día que pusieron el letrero de Mancha Real en la rotonda del polígono por parte del Ayuntamiento, vio que podrían estar receptivos a sus propuestas, ya que intentó mostrar alguna de sus creaciones al anterior grupo de Gobierno. Sin embargo, con este no consiguió se recibido y no le prestaron ningún interés.

La alcaldesa, María del Mar Dávila, apostó por este artista de una manera desinteresada. Figueroa comentó que, cada vez, presento más y más proyectos y que, desde el Ayuntamiento, le dan ánimo para seguir. “Me siento tan bien tratado que mi obra está realizada sin ninguna atadura o dirección de nadie, en total libertad”, detalla. Asimismo, el artista confesó que solo en la falla le dio el motivo de la representación, ya que la alcaldesa tenía muy claro el diseño para esa ocasión y sostiene que lo realizó lo mejor que pudo, sin salirse del guión, pero, eso sí, de nuevo “con total libertad”.

Ahora, a toro pasado, cree que tanto María del Mar Dávila como él son conscientes del trabajo realizado en Mancha Real para ponerlo al día en cuanto a arte en la calle se refiere. En el municipio, pudo realizar esculturas urbanas, la Falla 2018, murales al aire libre, clases extraescolares y un largo listado de proyectos marcados por la ilusión. Sobre sus obras explica que son trabajos que no son complicados de entender y, por su sencillez, cree que llegan a mucho público de diferentes edades y culturas. Algo que no se podía imaginar es cuando, el año pasado, desde el Ayuntamiento se le encargó el reto de hacer la falla. “Un trabajo de tal envergadura y tan arraigado en Mancha Real no se lo piden a cualquiera, para mí ha sido el elogio y reconocimiento más grande que me podía dar la alcaldesa María del Mar Dávila”, dice. El artista declaró que, por casualidades de la vida, hace 25 años vivió en la esquina del recinto ferial y pudo disfrutar de aquella fiesta. “¿Quién se hubiese imaginado que, al cabo de los años, me pedirían tal trabajo?” se preguntó Ramón Figueroa.

COLECCIÓN. En cuanto a los murales en el parque de los Maestros, al ver los muros vacíos, se le ocurrió pintar de perros de Walt Disney la pared de la zona de juegos para cánidos. Esto le gustó y, al acabar este trabajo, se le pidió otro mural que él llamó “1.000 Mariposas”. Cada uno tiene unos 30 metros y rematan el lugar con mucho colorido. Actualmente, Figueroa está acabando de restaurar el escudo de Mancha Real situado en la entrada del pueblo en el suelo con una superficie de uno 6x4 metros. “Me he dado cuenta al pasar los coches de la gran cantidad de gente que no sabía de este escudo y la buena acogida que está teniendo”, aseguró el artista.

Además, confesó que, en breve, empezará otro mural de flores que dará mucho más color a un parque en la calle Florida y afirmó que ya tiene varios proyectos en mente para presentar al Ayuntamiento próximamente. “Estoy seguro que todo el que tenga algún proyecto será bien recibido y tratado como yo. Desde aquí, animo a todo el mundo a que lo presentéis en este Ayuntamiento”, expuso.