El exotismo en la música clásica

La Orquesta Ciudad de Granada conmemora el 25 aniversario de la UJA

18 nov 2018 / 16:47 H.

El Aula Magna de la Universidad de Jaén (UJA) acogió el concierto extraordinario con motivo del 25 aniversario de la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la ley de creación de la organización académica de enseñanza superior en la provincia, a cargo de la Orquesta Ciudad de Granada, dirigida por la batuta del director musical Sergey Malov.

La orquesta granadina respondió con un magnífico concierto en el que predominaron los sonidos renacentistas, gracias a los músicos que la componen que cumplieron con creces la respuesta a la invitación de la institución académica para celebrar su vigésimo quinto cumpleaños.

Además de participar en el Concurso Internacional de Piano Premio de Jaén, la Orquesta Ciudad de Granada es conocida y querida por el público jiennense, ya que suele visitar la ciudad al menos una vez al año, con recitales que hacen las delicias de los numerosos asistentes, seguidores de la música clásica en todos los rincones de la provincia.

El concierto de anoche fue una muestra del programa que presenta la orquesta para esta temporada y aprovecha las cualidades artísticas y creativas del virtuoso ruso del violín, la viola y el violoncello da spalda, que es Sergey Malov. Con este raro instrumento del siglo XVII, Malov interpretó el concierto en Do mayor, Hob. VIIb:1, cuya autoría pertenece a Joseph Haydn, caracterizado por un final en el que predominó un andante allegro molto. Haydn volviño a tomar forma con la sinfonía militar número 100 en Sol mayor que soprendió con gusto al público.

El concierto para violín número 5 en La mayor de Wolfgang Amadeus Mozart atrapó a los asistentes en el exotismo del periodo clásico con puntadas de elementos populares que caracterizaron el repertorio de anoche. Un repertorio anclado en el clasicismo propio de estos dos compositores que dieron la bienvenida a los asistentes con la obertura de El rapto en el serrallo, creada por el compositor alemán y que constituye un paradigma en cuanto al gusto por lo exótico. Esta composición en tres actos está ambientada en el harén del palacio del bajá Selim, en un lugar no identificado del imperio otomano. La obertura es un Allegor en Do mayor y está musicalmente enlazada con el arial de Belmonte, un caballero español que intenta liberar del harén en el que está recluida a su prometida la bella Constanza.

En cambio, el concierto para violoncello en Do mayor, Hob. VIIb: 1, del compositor vienés Hydn fue creado precisamente para su interpretación en la corte húngara de los Esterrhazy, que anoche se hicieron presentes para el público del Aula Magna. El violín brilló con fuerza en la carrera de este maestro y en la magnífica interpretación de la Orquesta Ciudad de Granada que cerró el repertorio con una obra emblemática del siglo XVIII. Esta es una de las doce sinfonías compuestas por Haydn en la década de 1970 cuando fue contratado por el empresario Johan Peter Salomon para dirigir su música en Londres con una gran orquesta. En esta composición, la introducción de los clarinetes en Do, las fanfarrias con trompetas en Do y los efectos de percusión consiguieron, también anoche, los aplausos más espontáneos.