Casi once años de cárcel por maltratar y violar a su mujer

El tribunal da total credibilidad al testimonio de la víctima como prueba de cargo

13 nov 2018 / 13:32 H.

Diez años, nueve meses y dos días de prisión. Esa es la condena que la Audiencia de Jaén ha impuesto a Santiago M. M., un vecino de Lupión, por pegar a la que fue su mujer y forzarla a mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad. Los magistrados lo han considerado autor de delitos de malos tratos habituales y de agresión sexual. La sentencia relata un comportamiento “agresivo, despectivo y humillante” hacia su pareja, así como insultos, “puñetazos, patadadas, zarandeos y tirones de pelo”. En algunas ocasiones, esas palizas se producían en presencia de los dos hijos menores del amtrimonio. En otras ocasiones, Santiago M. M. obligaba a su mujer a masturbarse mientrás él la grababa y, posteriormente, la amenazaba con difundir esos vídeos. En el juicio, el acusado negó todos los cargos: “Ella era la agresiva conmigo”, alegó. Sin embargo, el tribunal no ha creído sus explicaciones. Es más, pone de manifiesto las “contradicciones” en las que incurrió a lo largo de sus diversas explicaciones.

La sentencia considera como hechos probados que fue a partir de noviembre del año 2015 cuando Santiago M. M. comenzó a ejercer una violencia física y psicológica sobre su esposa. En abril de 2016, la pareja comenzó los trámites de divorcio, si bien llegaron a reconciliarse e, incluso, viajaron juntos a la playa el 22 de julio para intentar reconducir la relación. Sin embargo, ese mismo día, Santiago M. M. volvió a pegar a la mujer durante el trayecto de vuelta. En la madrugada del 30 de julio, se produjo el episodio que hizo que ella se atreviera a denunciar. Tal y como se relata en la sentencia, el acusado entró en el dormitorio del matrimonio y le propinó varios puñetazos en la cara, golpes en el torso y patadas en el trasero. Después, le arrancó la ropa que llevaba puesta y obligó a su mujer a realizarle una felación: “Ella terminó cediendo por miedo a que continuara golpeándola”, explican los magistrados en su resolución judicial. Por la mañana, la mujer acudió al cuartel para denunciar. Santiago M. M. fue detenido y pasó tres meses en prisión preventiva por estos hechos.

Los jueces considera que la principal prueba de cargo es el testimonio de la víctima: “Transmite de forma nítida su sufrimiento al relatar los episodios vividos, sin que se pueda apreciar ninguna circunstancia a modo de resentimiento o venganza que empañe su credibilidad”, señalan. Además, la sentencia también enumera otros elementos de prueba, como la declaración del hijo mayor de la pareja, que presenció algunas de las agresiones. Igualmente, se tiene en cuenta los informes forenses, que avalan las manifestaciones de la víctima. La sentencia no es firme y cabe recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

La Fiscalía pedirá el ingreso en prisión

La Fiscalía de Jaén tiene previsto solicitar el ingreso inmediato en prisión de Santiago M. M. para que empiece a cumplir ya la condena impuesta sin esperar a los recursos del TSJA. Fuentes del Ministerio Público argumentan la gravedad de los hechos y de la condena impuesta, así como la existencia de riesgo de fuga.