¿Por qué no se acaban los pobres?

Lo que más me ha decepcionado al crecer es que aún exista el Tercer Mundo. De pequeña confeccionaba mi huchita de cartón para el Domund con forma de casa. Y pasan décadas y aún faltan casas de cartón. He oído en conferencias, o leído o comentado con un café, estas frases que no son mías y que repito: Nuestra esperanza de vida no depende de nuestro código genético, sino de nuestro código postal. El número de ciudadanos de la India ganará en 20 años a la China y para el año 2050 seremos un total de 9.800 millones de habitantes, la mitad de la población será africana. Se dice que África está en el estallido. ¿Cómo será nuestro futuro si vivimos con el cartel: comprueba antes de salir que has cerrado la puerta del portal? Pateras, vallas, muros..., lo que sea. Vienen, viene, vendrán. ¿De qué tamaño es el desafío inmigratorio? Confiesan que estamos curando la varicela con típex. ¿Por qué se criminaliza a los inmigrantes? También a los refugiados. También a quienes defienden a los refugiados. Si al final todos migramos, ¡sí! de la guardería, de la casa familiar, de nuestra soledad. ¿Qué harán los gobiernos? Opinan que hasta la UE es pequeña para dar la solución, se necesita un acuerdo cuerdo tan grande. ¿Por qué no se acaban los pobres?