Oportunidades perdidas

    04 abr 2018 / 09:35 H.

    Este año la primavera será más primavera. Con las abundantes aguas recibidas en este último mes, semejantes a aquellos temporales de antiguamente, se ha enmendado parcialmente el agobiante problema de la sequía. Pero no nos engañemos porque, ojalá que me equivoque, pero este bendito marzo lluvioso que nos ha hecho será una anécdota para recordar en la árida tendencia del cambio climático, al que los intereses económicos y el hedonismo de esta sociedad de principios del XXI impiden poner remedio.

    Esa precaria solución que la naturaleza nos ha regalado en forma de vivificante lluvia va a venir también a sacar las castañas del fuego a la dejadez al respecto del gobierno del PP que, enredado entre tramas de corrupción y el culebrón catalán, que tanto daño nos viene haciendo a todos, va a paliar la presión social para que se aborde de una vez por todas el problema del agua en España. Pero no es el único. Esta legislatura, por la composición de un Congreso sin mayorías, era propicia a llegar a grandes pactos, sin embargo, vamos hacia la mitad y, quitada la necesaria aplicación del 155 en Cataluña contra el intento golpista de una parte de políticos catalanes apoyados por una minoría social, ¿en cuánto hemos avanzado de los grandes problemas que acucian a nuestro país, el paro juvenil, las corruptelas políticas, la reforma de las pensiones, la ley electoral o la educación, por citar algunos? En nada. La subida de las pensiones, si finalmente se logra sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado, no deja de ser otro parche que no resuelve el problema estructural. Y el pacto por la educación se ha quedado en intento, como siempre, debido a la inoperancia en el diálogo o a la prioridad a postulados partidistas de los históricos PP y PSOE, que tal vez necesiten un recambio o reinventarse para adaptarse a nuevos tiempos. Demasiadas oportunidades perdidas. Volviendo al tema del agua y dándole la vuelta al refrán, nos volveremos a acordar de Santa Bárbara cuando no truene. Mientras tanto, disfrutemos de la hermosa primavera.