La reforma interminable

    25 nov 2018 / 12:09 H.

    Lo mejor que tiene nuestro sistema educativo son los docentes que, ante el anuncio de la reforma educativa, han pasado de la indignación al cachondeo. Provoca risa la reforma de la reforma sin conseguir un pacto escolar. Todo partido que llega al poder deshace lo que otro ha hecho en materia educativa si evaluar un resultado; recuerdo que el partido en el poder se salió presuroso del pacto educativo antes de mandar. Y no hablemos más de su afán por quitar del medio la asignatura de religión, siendo así que el 70% del alumnado elige libremente la asignatura sin ningún trauma ni problemática teniendo una alternativa. Por otra parte, no han tenido en cuenta las aportaciones que se han hecho antes de que se apruebe la ley. ¿Por qué cambiar lo que funciona bien? Eliminar esta asignatura, presente en toda Europa es desconocer el hecho religioso y su cultura tan presente en nuestra sociedad. No entiendo, lo siento, solo veo política oportunista que desorienta a la comunidad educativa cuando ésta lo que grita, pide, clama es un gran pacto escolar de una vez por todas, y si este pacto no está maduro, dejémosle estar así como está.