Un fin de semana repleto de actividad para La Vera Cruz

Un homenaje a los principios cofrades. La Primitiva Hermandad de la Vera Cruz de Linares protagonizó un fin de semana lleno de ilusión gracias a dos propuestas tan importantes para sus miembros y para la Semana Santa en general.

El sábado se inauguró en los jardines de la Estación de Madrid la Cruz del Humilladero. Recuerda la ubicación de la ermita homónima, hasta donde acudían los hermanos de la Venerable Orden Tercera que fundaron la Hermandad de la Vera Cruz de Linares al amparo de la orden franciscana, asentada en la villa de Linares. Antes de las procesiones, como primer acto de devoción y piedad popular, se realizaban el rezo del viacrucis, que, después de recorrer cuatro lugares sagrados, llegaba hasta el templo, quinto lugar sagrado, en recuerdo de las Cinco Llagas de Cristo. Esta manifestación pública y externa que realizaron los hermanos de la Vera Cruz, vivida en las calles y con los fieles de la ciudad en el rezo del viacrucis de forma itinerante con traslado del Santísimo Cristo de la Sangre es el principio de las manifestaciones pasionistas en Linares y origen de la Semana Santa.

El proyecto resulta posible gracias a la colaboración del Ayuntamiento y el compromiso de la hermandad. La idea fue concebida como parte de los actos de la conmemoración del 450 aniversario de la aprobación de las primeras constituciones, en 2008. Más de una década después la iniciativa quedó materializada, para satisfacción de los hermanos.

Ayer llegó el turno para la bendición del Santísimo Cristo de la Sangre y del retablo compuesto en la capilla para acogerlo, junto a los patronos de la ciudad, San Sebastián y San Agustín. El Crucificado es una imagen del siglo XIX que fue donada por un hermano y que permite a la Hermandad de la Vera Cruz recuperar la devoción hacia la imagen que presidía los viacrucis celebrados hasta la ermita del Humilladero. El 20 de febrero de 1545, se firmó el contrato de hechura del Señor de la Sangre, suscrito por los hermanos de la Vera Cruz y Juan de Reolid. De ello queda constancia documental, de manera que se ultima el 475 aniversario de tal contratación. Este es el primero de los actos de la efeméride, de otros muchos que se celebrarán durante el año 2020. La cofradía tiene el título de “primitiva”, por el mismo motivo, al tratarse de la primera formada en la ciudad. De ella comenzaron a surgir otras formaciones, entre ellas se encuentra, por ejemplo, la de la Columna. Linares cuenta ya con unos símbolos que recuerdan el origen de un colectivo señero y de quienes comenzaron a peregrinar cada año hasta la ermita del Humilladero. La Hermandad de la Vera Cruz continúa, de esta manera, con proyectos que ensalcen y den aun más importancia a ese bien tan preciado con el que se cuenta. Además de la presencia de varios integrantes de la Corporación Municipal, destacó, durante los actos, los reconocimientos a quienes colaboraron en la materialización de los signos. Las iniciativas suponen un espaldarazo para una hermandad representativa de la devoción popular existente en la Ciudad de las Minas.