La escasez de luz en el casco antiguo ya no es un problema

La asociación vecinal pide a los ciudadanos que denuncien posibles deficiencias

13 ago 2018 / 16:00 H.

La iluminación en el casco antiguo traía de cabeza a los vecinos del barrio. Sin embargo, ya no es un problema para los que viven en esta emblemática zona de la ciudad. Así lo expresa María Martos, responsable de la asociación vecinal, que asegura llevar un tiempo sin recibir quejas de sus convecinos. “Es cierto que cuando se realizó el cambio de las farolas había algunos puntos que se quedaban sin luz suficiente, o incluso ninguna”, subraya, a la vez que pone de manifiesto la importancia del trabajo municipal en este sentido. “El Ayuntamiento instaló más farolas en los puntos donde los vecinos nos indicaron”, puntualizó.

Martos señala como ejemplo una de las zonas más representativas del casco antiguo, la Plaza Sánchez Caballero, que fue uno de los puntos que se quedaron sin iluminación suficiente una vez acometido el cambio en la red de farolas. “Los vecinos nos transmitieron que se quedaba totalmente a oscuras por la noche, por lo que lo pusimos en conocimiento del Ayuntamiento, que instaló aún más puntos de luz en las inmediaciones de la plaza”, asegura Martos.

A este respecto, la responsable considera zanjado el problema, aunque no descarta que haya otras zonas sin iluminación. “Si yo paso por alguna calle y lo percibo, lo pongo en conocimiento, pero quizás haya zonas en las que se de el problema y no estoy al tanto”, afirma.

De esta manera, invita a los vecinos a que, si aún existen puntos en los que la iluminación sea deficiente al caer el sol, lo trasladen a la asociación de vecinos para que, desde ahí, puedan atajar el problema. “Hace tiempo que no tenemos ninguna queja vecinal por este asunto, por lo que considero que se trata de un problema que ya está más que solucionado”, puntualiza con satisfacción la responsable, que se alegra de que el casco antiguo luzca perfectamente iluminado.

VANDALISMO. Otro de los problemas a los que deben hacer frente en la zona del casco antiguo es a los vándalos. No hace mucho se vivieron dos episodios que pusieron sobre alerta a los vecinos del barrio. El último y más sonado fue la pintada en los muros de piedra de la Basílica de Santa María La Mayor, recién rehabilitada por la Junta de Andalucía, que amaneció el 19 de junio con un mensaje bastante soez. “Hola, para ti mi cola” es lo que podía leerse en la pared del templo, algo que causó crispación, por lo que tanto los vecinos como los demás ciudadanos de Linares no tardaron en condenar, a través de las redes sociales, el acto. Además, unos meses antes, el vandalismo hizo mella en la calle Alonso Poves, en pleno corazón del casco antiguo de la ciudad, que también amaneció con algunos desperfectos. Entre ellos, una papelera en el suelo, arrancada de cuajo de la pared, y de la que habían sacado todos los desperdicios, que lucían esparcidos por las inmediaciones de la calle. En esta línea, una de las estructuras metálicas que separa la zona del acerado de la carretera, apareció también arrancada.