Protesta contra el recorte de la vigilancia en los hospitales
El temor al despido de más vigilantes se suma a las críticas con la sanidad
La plataforma que trabaja en defensa de la sanidad encuentra una nueva causa. Con la cocina del Neveral todavía “en el aire” o, incluso, rumbo al cierre definitivo, delegados de CC OO y miembros de los colectivos que abogan por unos servicios sanitarios de calidad y contra los recortes en los centros de salud y los hospitales se manifestaron para alertar de que el nuevo pliego de condiciones del contrato de vigilancia de los centros de salud y de los hospitales jiennenses conlleva un recorte en las horas de los vigilantes, es decir, que habrá menos personal o que los guardas estarán menos tiempo en los ambulatorios, consultas y otras dependencias públicas.
El secretario general de CC OO en Jaén, Francisco Cantero, abanderó esta nueva protesta. “No se pueden sustituir a las personas por cámaras de vigilancia. La labor de estos trabajadores resulta indispensable para garantizar la buena labor de los profesionales y proteger los recursos públicos”, manifestó Francisco Cantero. Asimismo, continúa: “Sería tremendo que se aplicara este recorte que conllevaría una disminución de 21.000 horas anuales de vigilancia si se compara con los requisitos que se solicitaban durante 2011”. Sin embargo, este nuevo frente surge cuando todavía no está claro qué ocurrirá con la cocina del Neveral.
En pruebas. Los manifestantes explicaron que, actualmente, existe un servicio en pruebas gracias a un proveedor único y aclaran que la calidad de la comida ha mermado considerablemente. Señalan que los fritos llegan sin la temperatura adecuada y que se han dado casos de comidas que están muy lejos de lo que serían los platos si la cocina funcionara de manera normal. Por eso, consideran que se trata de una situación lamentable que no es más que un paso más dentro de la progresiva desmantelación del Hospital Doctor Sagaz, conocido popularmente como El Neveral por el entorno en el que se encuentra.
Francisco Cantero recuerda que la aprobación del nuevo pliego de condiciones implicaría prácticamente la desaparición de la seguridad en Andújar y alrededor de 1.700 horas menos en Linares, lo que podría conllevar el despido de otro vigilante. “Se trata de una situación que nos lleva a la movilización. Estamos cansados de recortes, por lo que instamos a la Junta de Andalucía a ampliar las horas de servicio en el pliego”, dice.