Premio a la Mejor Trayectoria Académica para Sandra Mesa

El galardón andaluz distingue a los siete alumnos con expedientes destacados

20 nov 2018 / 09:16 H.

Fundación Unicaja y la Academia de Ciencias Sociales y del Medio Ambiente de Andalucía se unieron para entregar los Premios Trayectorias Académicas Universitarias en su duodécima edición. Un galardón que distingue a los siete alumnos de centros andaluces de educación superior que han finalizado sus estudios con los mejores expedientes y curriculum vitae. La iniciativa se enmarca en el interés de ambas entidades de premiar la excelencia en diferentes ámbitos como la Cultura, las Ciencias Sociales, Económicas, Empresariales y del Medio Ambiente, así como impulsar las acciones que contribuyan a mejorar el tejido empresarial.

La ceremonia de entrega se celebró en la sede de la Universidad Internacional de Andalucía en Sevilla, presidida por Manuel Jiménez, vicepresidente de la Junta de Andalucía, que estuvo acompañado de Braulio Medel, presidente de la Fundación Unicaja; Antonio Pascual, presidente de la Academia de Ciencias Sociales y del Medio Ambiente; José Sánchez, rector de la Universidad Internacional de Andalucía, y Santiago Herrero, secretario canciller de la Academia.

Los galardonados de esta edición se eligieron por unanimidad, y en el caso del Premio Andaluz a la Mejor Trayectoria Académica fue para Sandra Mesa (Alcalá la Real), que cursó un doble grado en Derecho y ADE en la Universidad de Jaén, con una dotación económica de 3.000 euros. En el ámbito de la Economía el reconocimiento recayó en Manuel Martín Valverde, con 1.500 euros; en Derecho en María de la O Salas, de la Universidad de Málaga, con 1.500 euros; en Ciencias Medioambientales fue para Josué Viejo, de la Universidad de Cádiz, con 1.500 euros; en Ciencias Políticas y de la Administración fue para Francisco Javier Rueda, de la Universidad Pablo Olavide, con 1.500 euros; en Ciencias Sociales para Francisco Javier Ogáyar, de la Universidad de Granada, con 1.500 euros, y en Estadística a Christian José Acal, de la Universidad de Granada, con 1.500 euros. Los premios Andaluces de Trayectorias Académicas nacieron hace doce años como una iniciativa de la Fundación Unicaja y la Academia de las Ciencias Sociales y del Medio Ambiente, con el fin de premiar la excelencia en los estudios y el impulso, así, de la educación y la investigación en el plano superior de la enseñanza. El jurado estuvo presidido por Antonio Pascual, presidente de la Academia, y compuesto por Braulio Medel, presidente de la Fundación Unicaja; José Sánchez, rector de la Universidad Internacional de Andalucía; Sergio Corral, director general de la Fundación Unicaja; Adelaida de la Calle, presidenta de la Corporación Tecnológica de Andalucía, y Santiago Herrero, secretario canciller de la Academia.

“Estamos dispuestos a enriquecer a la sociedad”
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“Este premio no solo supone una recompensa por un trabajo bien hecho, sino también un impulso para seguir luchando”. Así se expresó Sandra Mesa al inicio de su agradecimiento, en el que reconoció que, a pesar de las dificultades en el acceso al mercado laboral, estos actos de reconocimiento llevan a los jóvenes al entusiasmo para seguir avanzando: “Además de confirmarnos que el camino que seguimos es el adecuado y que la sociedad todavía confía en nosotros”. Así, pese al desencanto que, apuntó, se palpa en la sociedad con las nuevas generaciones, los siete premiados demuestran que tienen mucho que aportar. “Nuestras trayectorias académicas son el escaparate de los valores que los jóvenes aún tenemos y muchos creen que hemos perdido. La cultura del esfuerzo y la disciplina aún se siente en la aulas de los colegios, institutos y universidades. Los centros docentes se están convirtiendo en una cuna de una generación que domina la tecnología, que conversa en diversos idiomas y que lleva el espíritu innovador e investigador como estandarte”, apuntó.

La tolerancia, la diversidad, el respeto, la igualdad, la amistad y la libertad son algunos de los “ingredientes” que, esgrimió, han servido para su formación no solo como estudiantes, sino también como ciudadanos críticos “ansiosos por hacer de éste un mundo mejor”. Estos premios sirven para mostrar a la sociedad que merece la pena creer en los jóvenes: “También ponen de manifiesto que los recursos invertidos en educación y formación, lejos de ser malgastados, se convierten en excelencia académica”. Sandra Mesa agradeció el reconocimiento a los organizadores, y también tuvo palabras para su familia, que le arropa y acompaña en todas sus decisiones.