Nuevos TACs a seis momias

La misión de la Universidad de Jaén en Asuán pretende estudiar los restos y mantener su envoltura original

16 feb 2018 / 09:25 H.

El proyecto Qubbet el-Hawa que dirige la Universidad de Jaén en Asuán (Egipto) realizó, por segundo año, el TAC a seis momias del siglo VI antes de Cristo, encontradas en la tumba 33 de esta necrópolis en 2014, con el objetivo de estudiarlas y analizarlas de una manera no destructiva, manteniendo su envoltura original de vendas de lino colocadas en el proceso de momificación.

Los análisis, realizados de nuevo en el Hospital Universitario de Asuán, contaron con la presencia del director del proyecto, que estuvo acompañado por el rector de la Universidad de Asuán y el del hospital universitario, y por miembros del equipo de Antropología de la Universidad de Granada, que forma parte del proyecto.

La misión extranjera que dirige el profesor de Egiptología de la UJA, Alejandro Jiménez, aplicó de nuevo esta tecnología a las momias halladas durante sus excavaciones gracias al convenio firmado en 2016 entre las Universidades de Asuán y Jaén. El pasado año, estos análisis permitieron descubrir los casos más antiguos conocidos de cáncer de mama en una mujer y un mieloma múltiple en un hombre.

La técnica de la tomografía computerizada, realizada con la última tecnología en escáneres, permitirá a los investigadores estudiar, sin dañar las momias, diferentes aspectos como la edad, las posibles patologías que sufrieran en vida, los amuletos u objetos de adorno que pudieran portar, las técnicas de momificación y cualquier aspecto ritual que contengan. “A partir de los análisis, esperamos seguir aportando datos sobre la vida y la muerte en el Egipto faraónico de hace más de 2.500 años”, asegura Alejandro Jiménez. La misión arqueológica que dirige la UJA en la necrópolis Qubbet el-Hawa, frente a la ciudad egipcia de Asuán, cumple su décima campaña de excavaciones y se prolongará hasta el mes de marzo. Durante esta década, el proyecto es uno de los que más éxito científico tienen, tanto por encontrar hasta seis tumbas intactas como por descubrir el cáncer de mama más antiguo del mundo.

Este año participan 35 investigadores de diferentes universidades españolas y europeas, de múltiples especialidades —dos tercios pertenecen a la UJA—, y otros 5 más egipcios. En total son cinco las tumbas sobre las que se intervienen este año, con diferentes objetivos marcados.