Guerra sin cuartel contra los furtivos

La Guardia Civil intensifica la vigilancia contra la caza ilegal con un operativo de casi 350 agentes

19 sep 2018 / 12:02 H.

La Guardia Civil vuelve este año a librar una guerra sin cuartel contra los furtivos que “trabajan” en la provincia. Como cada año, la Comandancia pone un dispositivo que trata de evitar esta caza ilegal. Comienza en septiembre, en plena época de berrea, y termina cuando concluye la temporada, a finales de marzo. Durante ese periodo, casi 350 agentes formarán parte de ese operativo, que hará especial hincapié en los cuatro parques protegidos de Jaén: Cazorla, Segura y las Villas; Despeñaperros; Sierra de Andújar y Sierra Mágina. Todos estos guardias civiles provienen de la diferentes unidades ubicadas en los parques naturales de la provincia, así como los destinados en los 33 acuartelamientos más próximos a estos espacios protegidos. Además, completarán el operativo 81 vehículos (78 vehículos todoterrenos y turismos, dos vehículos camuflados, una furgoneta monovolumen), 32 motocicletas, una embarcación, un helicóptero, dos cámaras térmicas, dos visores nocturnos y equipos de grabación óptica y digital.

También se establecerán contactos con las comandancias limítrofes con la provincia de Jaén como son las de Córdoba, Ciudad Real, Albacete y Granada. El objetivo es mejorar el intercambio de información y realizar servicios conjuntos. Se van a establecer puntos de identificación, controles en las diversas zonas y cierres de zonas específicas con personal del Seprona, de las unidades de Seguridad Ciudadana y de la Usecic, todos ellos apoyados con avanzados medios tecnológicos. Incluso, se utilizarán cámaras térmicas, que detectan la temperatura, para descubrir a los que cazan fuera de la ley, cubriéndose con la oscuridad de la noche.

Asimismo, se establecerán contactos con los guardas de campo, en los que se les instará a utilizar la plataforma “AlertCops” para notificar cualquier irregularidad que pudieran apreciar, así como los protocolos de actuación. Un año más se seguirá trabajando con la Unidad Adscrita del Cuerpo Nacional de Policía y con los agentes de Medio Ambiente. En el pasado ejercicio, el operativo realizó 770 servicios. Llevaron ante el juez a siete personas por delitos contra la fauna y la flora, relacionados con la caza ilegal, los daños en cotos, el robo y la tenencia ilícita de armas. Los agentes han retirado del campo decenas de jaulas trampa, cepos y otros medios de caza indiscriminada y que están prohibidas por la normativa vigente. También se formularon 36 denuncias por infracciones administrativas, la mayoría relacionadas con la sanidad animal.