Contenedores pequeños en Los Olivares “contra vertidos”

Un mes después de que la Asociación de Empresarios del Polígono de Los Olivares (AEPO) le diera un ultimátum al Gobierno local, para reclamarle que la principal zona industrial de la capital dejara de ser un gigante “basurero” llegan algunas medidas. El presidente de AEPO, Ramón Rueda, explica que se atiende una de las reivindicaciones planteadas en el encuentro pasado, en el que se vieron las caras con los concejales de Mantenimiento Urbano, Juan José Jódar; Hacienda, Manuel Bonilla, y Seguridad y Tráfico, Juan Carlos Ruiz, y, por fin, comienzan a eliminarse los contenedores de grandes dimensiones que había diseminados por el polígono. En lugar de estos se colocan, como aclara el responsable de AEPO, otros de menos tamaño con los que se pone freno, tal y como creen en la entidad, a que se depositen desperdicios sin control, objetos voluminosos que se traen, expresamente, como lamentan en la asociación, incluso desde municipios de los alrededores.

Otra de las medidas que ya está en marcha y que aplauden los empresarios, que ya estaban dispuestos a poner en marcha acciones de presión para lograrlo, es que se incrementa la limpieza. Una máquina barredora ya opera en la zona y se dedica a pasar por la calzada, como apunta Rueda que, eso sí, considera preciso que también se repasen las aceras. Con un voto de confianza en el Gobierno local, a AEPO no se le olvidan, no obstante, otros compromisos, como el que recordarán en breve al Gobierno local para que cumpla con su promesa de comenzar a eliminar vegetación y maleza.

Otro de los retos es mejorar el estado del asfaltado, como aseguró el PSOE, que llamaba la atención sobre los desperfectos que presenta la Ronda de los Olivares, que es la principal arteria del polígono industrial.

Mientras en el suelo dedicado a las industrias, incluido el parque Nuevo Jaén, comienza a mejorar la percepción por el servicio de limpieza que presta FCC, como contratista de la Administración local, en el resto de la ciudad no terminan de convencer los nuevos contenedores instalados, de carga lateral. Aunque son más grandes los nuevos recipientes instalados, que son de color marrón, no blancos como los del Polígono de Los Olivares, los vecinos se quejan de que hay menos. Ello implica que se acumulen bolsas en el suelo lo que, con lo elevado de las temperaturas, es un potencial problema de malos olores y alimañas.