“Recuerdo a tía Paquita”

El poeta jiennense Miguel de la Torre Padilla dedica un emocionado y emocionante poema a una mujer sencilla pero grande, a la que revive gracias a sus sentidos versos.

En medio del silencio
recuerdo esa mirada suya,
y esas manos tan mermadas
tan trabajadas y tan
sencillas.

Su mirada repleta de amor
al igual que su corazón,
que llevaba por bandera
nobleza, lealtad y razón.

Mujer de surcos arrugados
de vida reflejada en las
mejillas,
que luchó buscando el futuro
envuelta en su blanca
toquilla.

Ella era el sol del cielo,
el lucero de piel arrugada,
con la mirada ilusionada
cuando la llamaban abuela.

Vivió contra viento y marea
entre dolencias y tristezas,
y un día se quedó dormida
para descansar de lo vivido.