“Mi trabajo es hacer que la gente se sienta lo mejor posible”
El delegado de campo de La Guardia ha ejercido toda su carrera en el mundo del fútbol en el mismo club, en que le vio crecer como jugador y persona
Tiene el cariño y el respeto por parte de jugadores, tanto de su club como rivales, entrenadores y colegiados. Además, también ha conseguido que todo un municipio le apoye gracias a su trabajo, en diferentes puestos, en la Unión Deportiva La Guardia. El delegado de campo Francisco Castillo se ha dedicado durante toda su vida al club de su pueblo. El propio Castillo reconoce que comenzó como jugador con 13 años, y lo dejó a la edad de 33: “Mi trayectoria como futbolista fue desde los 13 años hasta los 33. Siempre he estado en La Guardia”.
Cuando dio por finalizada su etapa como jugador en La Guardia, lejos de alejarse del fútbol se implicó un poco más si cabe y se convirtió en miembro de la directiva de la UD La Guardia. La última etapa de Francisco Castillo en el equipo del municipio que lo ha visto crecer y envejecer aún no ha terminado. Actualmente ya no se encuentra en la directiva, pero sus funciones están muy cerca del terreno de juego, realiza las funciones del delegado de campo, y como él mismo narra, en ocasiones, actúa como ayudante del entrenador: “Cuando terminé de jugar estuve como directivo y por último como delegado de campo. En este tipo de equipos, que son muy pequeños, tenemos que hacer de todo, todas las tareas que sean necesarias para seguir adelante”.
El puesto de Francisco Castillo como delegado de campo es una posición que desempeña con gusto, es un honor para él ver a su equipo cada fin de semana desde el banquillo del equipo. Sus funciones son claras, y las describe: “Ahora mismo ocupo el puesto de delegado de campo y también el de ayudante de entrenador. El trabajo consiste en tratar a los árbitros lo mejor posible, que se sientan a gusto. Cuando los demás equipos vienen aquí, a tu casa, atenderlos lo mejor posible”.
El integrante de la Unión Deportiva La Guardia afirma que estar tanto tiempo en el club le ha aportado valores, saber estar y una educación. Además, agradece a la formación apostar con el cuando tan solo era un niño de 13 años. También da las gracias por acordarse de una persona que lleva tanto tiempo implicada en el fútbol base: “Hay que agradecer que se acuerden de una persona que lleva tanto tiempo implicado en un mismo equipo. Es un orgullo recibir el premio”.