¿Qué fue de la pianista que desapareció antes de la final?

Enrique Armenteros publica La ciudad ajena, ambientada en el concurso

01 abr 2016 / 07:30 H.

Inspiración para músicos, y también para escritores. La ciudad ajena, nueva novela de Enrique Armenteros que verá la luz en las próximas semanas, se sumerge de lleno en la quincuagésima edición del Concurso Internacional de Piano “Premio Jaén”. Es el prestigioso certamen, el más antiguo de España, el marco y excusa para relatar una historia llena de misterio y música en la que la ciudad y la extraña belleza de algunos de sus rincones más olvidados son plenos protagonistas.

Fue, en coincidencia con la vuelta de este profesor de Lengua y Literatura a Jaén, “a casa”, a la ciudad en la que nació y creció, cuando se avivaron en él las ganas de ambientar una novela aquí. Tenía ya en mente algunas ideas pero, tras presenciar la emocionantísima final del concurso de piano hace un año, todas las piezas le encajaron para dar vida a esta novela. El piano, un instrumento envuelto en un magnético misterio, como defiende, es el eje de esta historia, que parte de una desaparición, más de una década antes, de una participante del certamen, la favorita para la final. “Es una joven promesa japonesa, un portento como todos los que acuden al concurso de piano que, extrañamente, desaparece. Y precisamente, en la edición de este año, doce años después, aparece una pista para descubrir el misterio de lo que había pasado con ella”, explica el autor. Para tirar del hilo, necesitaba un personaje que “conociera bien la ciudad” y da protagonismo a una joven periodista —precisamente de Diario JAÉN—, a la que le toca cubrir la información del Premio “Jaén”, pero se ve envuelta en la investigación. Ella, curiosamente como él, acaba de volver a vivir a la ciudad y redescubre aspectos insospechados de ella.

De hecho, Jaén es escenario y protagonista, como defiende Enrique Armenteros. “El barrio viejo y la judería se prestan a este juego tan cinematográfico. Aparecen rincones abandonados, con una belleza extraña y todos los rincones emblemáticos de la ciudad”, comenta. Quiere redescubrir al lector esta ciudad, al igual que hace la protagonista, y mostrar a la gente de aquí detalles que no se valoran o pasan desapercibidos. La importancia del Premio “Jaén” es buen ejemplo: “En la novela también aparece la extrañeza que produce en los concursantes extranjeros llegar a Jaén a un acontecimiento tan importante que, en la propia ciudad, es desconocido, que tiene más relevancia internacionalmente que dentro”. Este es su tributo literario a esta ciudad, un proyecto en el que ha puesto él y todo el equipo que ha participado mucho mimo. De hecho, presentó el proyecto a la Diputación de Jaén, institución organizadora del certamen, y consiguió su apoyo para la edición de la novela. También cuenta con la colaboración del pintor Francisco Alcántara Blanca, Falcant, en el diseño, y Miguel Olea Romacho, que ha dirigido un booktrailer promocional de la novela. La ciudad ajena es su cuarta novela, tras 11.35 (Bohodón, 2012), Estación fantasma (Dauro, 2014) y Un lugar llamado viento (PeZsapo, 2015).