Jaén se ríe sin condiciones gracias a Santi Rodríguez

El humorista y actor presenta Infarto ¡No vayas a la luz! en el Infanta Leonor

05 nov 2018 / 11:42 H.

Que Santi Rodríguez ama su tierra, Jaén, es una verdad tan incuestionable como la certeza científica que afirma que el agua hierve a 100 grados centígrados o que este elemento y el agua no pueden mezclarse. Por eso, el más jaenero de nuestros actores— como lo define su amigo y compañero Francisco Zaragoza— eligió el Ala Oeste del vetusto Cine San Antonio, de Peal de Becerro, para el estreno de su obra más íntima y personal, Infarto ¡No vayas a la luz!, un repaso en clave humorística de su experiencia médica tras la inesperada afección de corazón que sufrió en 2017. Por eso, y porque con Cómo en casa de uno, en ningún sitio descubrió un espacio con encanto propio perfecto para un pase especialmente dedicado a sus familiares y amigos más queridos.

Tras el éxito cosechado en el Teatro Municipal Maestro Álvarez Alonso de Martos— que colgó el cartel de todo vendido—, las tablas del Teatro Infanta Leonor acogieron anoche el estreno de Infarto en la capital, ante un multitudinario público volcado con el actor y su habilidad para tratar temas tan peliagudos como el de la sanidad. Precisamente a el actor agradeció el excelente trabajo de todos los profesionales pertenecientes a este sector. La voz del director de la obra, Manu Sánchez, presentó al cómico de Jaén en una representación que, como ya anunció el protagonista, se enmarca en la programación del XIX Festival de Otoño de Jaén, en el que Los días de la nieve, con otra actriz jiennense de raza, Rosario Pardo, enamoró a sus paisanos al meterse en la piel de Josefina Manresa, la esposa del poeta Miguel Hernández.

Las carcajadas resonaron anoche en el Infanta Leonor con las constantes burlas a la muerte del actor que apareció en escena ataviado con una bata de hospital y otros elementos como un gotero, un cama o un biombo para que su monólogo no perdiera su razón de ser. Y esta no es otra que la experiencia de un hombre maduro que sufre un infarto a causa del cual casi pierde la vida. Así, a un paso de desaparecer en el más allá, Santi Rodríguez repasa su propia existencia antes de que los médicos consigan reanimarle.

Consciente de sus últimos instantes como ser humano, el protagonista decide cumplir sus sueños y aprovechar las segunda oportunidades. Con la desenvoltura que otorga la experiencia, el jiennense se metió en el bolsillo a un público entregado al que agradeció su presencia y por que afirmó que la provincia merece la pena. Profeta en su tierra, le espera el Teatro de la Esquinas, en Zaragoza, el Centre de Congressos de Andorra la Vella y el Teatro Apolo de Miranda del Ebro, entre otros, donde Infarto volverá a ser un éxito.