El arte atemporal de Sofía Tudela

La joven jiennense comparte el espacio ofrecido por el Nude Bistrot con una fusión de sus vivencias

15 ene 2019 / 11:49 H.

Una apuesta por la cultura y el arte más joven. La iniciativa del Nude Bistrot, ubicado en el barrio de San Ildefonso, tiene como protagonista a Sofía Tudela, una jiennense de 22 años que inauguró este fin de semana una exposición de lo más variopinta, repleta de sus vivencias artísticas. Como muestra de agradecimiento, la joven compartió esta fecha con unos amigos, Marina Bravo y Javier Garrido, quienes terminaron de completar una velada llena de arte con sus guitarras. El interés de Sofía Tudela por la pintura le viene desde pequeña. Y es que su formación en esta disciplina ha sido puntual, “gracias a esos sábados por la mañana que pasé pintando óleos en el taller de Raquel del Castillo durante unos cinco años”, explica. Sin embargo, ella misma se define como autodidacta.

Respecto a los dibujos y pinturas expuestas, se pueden apreciar caras y más caras, cabezas y cuellos largos. Se trata de caras de personas, con los ojos cerrados en su mayoría, ambiguas en su género, y con cuellos largos como extensión de su propio mundo onírico. La jiennense asegura llevar siempre una libreta en todos sus viajes, por lo que la pintura siempre ha sido una constante en muchos ámbitos de su vida. Durante la inauguración, Sofía Tudela expresó su idea de que “cada cabeza es un reloj”.

“Sabemos que el tiempo ha existido desde mucho antes que nosotros, y que se mantendrá incluso posterior a nuestra desaparición. Pero el tiempo que medimos nace y muere con cada persona. Este es subjetivo, no pasa igual para todos”, manifestó.

Citó también al cineasta y escritor ruso, Andréi Tarkovski, quien afirmaba que el tiempo es imprescindible para el hombre, ya que este le ayuda a constituirse como individuo. Desde el inicio del tiempo los humanos hemos buscado la manera de perdurar en él, y de ahí surgieron las artes.

En medio de estas filosóficas reflexiones, la joven presentó una serie de pinturas, pero también de fotografías, que se completaban con la música de los otros dos artistas jiennenses. Tudela asegura que, en esta muestra, pretende mostrar todo lo que le ha servido siempre de inspiración, su pasión. Estudiante de Marketing, su interés por la fotografía se vio saciado con un único taller de iniciación y miles de disparos con su cámara. Si bien es en el arte donde reside la memoria, la fotografía es el arte ligado ontológicamente al tiempo. “No solo por su capacidad de representación del mismo, sino también por su cambio de significado y valor conforme pasan los años”, explicó.

Es por esto que las fotografías expuestas en el Nude Bistrot buscan, en palabras de su autora, reflejar la captura del tiempo o la muerte del tiempo ya pasado. Pues ya lo decía Borges: “La muerte hace preciosos y patéticos a los hombres. Estos se conmueven por su condición de fantasmas; cada acto que ejecutan puede ser el último; no hay rostro que no esté por desdibujarse como el rostro de un sueño”. La exposición, que estará disponible para el público durante todo el mes de enero, es una oda a la juventud, el tiempo y la creatividad de las futuras generaciones.