“Los periodistas tienen que ser mensajeros de la paz”

El padre Ángel felicita en su discurso a Diario JAÉN por “dar voz a los sin voz”

18 dic 2016 / 11:14 H.

Precioso y, sobre todo, emocionante discurso el que ofreció el padre Ángel para homenajear a Diario JAÉN en su 75 aniversario. Fue el gran invitado del tributo final y sus palabras bañaron de solidaridad y amor la sala, todo ello con la innegociable e impertérrita sonrisa que le caracteriza.

Acompañado en la mesa con Juan Espejo, director de Diario JAÉN; Rosa María Cárdenas, tercera teniente de alcalde; y Ana Delia Estrada, coordinadora provincial de Voluntariado, el padre Ángel fue el encargado de clausurar el acto y lo hizo de la mejor forma posible: con un agradecimiento, en primer lugar, a las ONG por hacer de este mundo un lugar mejor y en segundo término, al cumpleañero periódico por ser “la voz de los sin voz”. “Todas las ONG somos fruto de esta sociedad, una sociedad que ha querido que nosotros, como fruto de ella, seamos esas personas, esas voces que podamos estar cerca de los más desfavorecidos, y por eso nos congratulamos con todos, sonreímos, somos felices, pero nosotros solo somos fruto de la sociedad. Gracias a los periodistas, que hacen tanto por visualizar los problemas de nuestra sociedad, por decir las cosas claras, ya que defendéis los derechos fundamentales de las personas, llamáis cuchillas a las concertinas”, dijo.

Tras invitar a ser activos en vez de eméritos —en alusión a las palabras del Papa Francisco el presidente de “Mensajeros de la Paz” invito a todos a reflexionar y hacer balance de 2016. Y es que situaciones como la guerra de Haití, los atentados y, especialmente, la grave crisis de refugiados de Siria, son asuntos que a todo el mundo, en palabras del “mensajero”, deben preocupar: “Debemos preguntarnos qué hemos hecho para limar estas situaciones. Los periodistas, lo que podeis aportar para mejorar el mundo son vuestras palabras, la prensa es la mejor mensajera de la paz, procura que lo importante quede dentro de sus noticias”, aseguró. Hizo una interesante distinción entre lo importante y lo influyente: “Lo importante no tiene que ver con lo influyente, lo influyente lo encontramos siempre en los periódicos: futbolistas, actores, entre otros. Lo importante está en personas que duermen en la calle. Es el caso de aquellos que vienen a San Antón, con menos de cuarenta años, y que lo que más añoran es poder llegar a casa, sentarse en el sofá y poder ver la televisión tranquilamente.

En la segunda parte de su discurso siguió en la misma línea y pidió a todos implicación para mejorar el mundo: “Tenemos que ser mensajeros de la paz, dar apoyo y soporte desde nuestra plataforma para los que están atravesando los más duros momentos y están en riesgo de exclusión social. Mi enhorabuena a los periodistas, y aquí, en esta sede, estamos felices de encontrar un gran periódico que habla de los temas importantes”, aseveró el padre Ángel. En su opinión, Diario JAÉN, en sus siete décadas y media de vida, ha conseguido alcanzar largas periferias con el uso de la palabra como herramienta: “Quedaos con lo bueno en este balance, quedemonos con lo que hemos hecho bien y lo que hemos contada con ética”, añadió muy satisfecho.

Por último lanzó un mensaje de solidaridad y optimismo: “Se trata, por lo tanto, de quedarse con lo bueno. Me quedo con ese menor no acompañado que llegó a “Mensajeros de la Paz” diciendo que había conocido Madrid, me quedo con quienes, como tantas asociaciones, acompañan a personas con enfermedad mental o discapacidad intelectual, o quien hace voluntariado en un banco de alimentos o quienes acompañan y llaman por teléfono a personas vulnerables. Me quedo con la ayuda que seguimos ofreciendo, con la solidaridad de nuestros amigos de “Quesada Solidaria”, me quedo con los médicos que dejan sus clínicas y se van meses a salvar Haití y El Salvador, cocineros que ayudan en comedores sociales, abogados que ayudan a los refugiados con sus papeles o psicólogos que escuchan sin animo de lucro”, finalizó.

De este modo, en sus poco más de diez minutos de intervención, el padre Ángel clausuró el año de tributos de Diario JAÉN. Doce meses intensos y emocionantes que se cerraron con las palabras de una de las personas que más luchan por hacer de este mundo un lugar mejor: “Mi enhorabuena a Diario JAÉN”, expresó.