Las políticas activas de empleo recibirán cerca de 4,5 millones
Las nóminas del personal suponen el 36% del total de gastos del presupuesto
Un presupuesto equilibrado, real y realizado de forma minuciosa para no caer en situación de déficit”. Así es como el concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Linares, Luis Moya, definió la propuesta que el equipo de Gobierno socialista presentará para el ejercicio económico municipal del presente año. Unas cuentas públicas que serán llevadas al pleno extraordinario del próximo jueves, para ser debatidas por parte de los grupos políticos con representación en la Corporación Municipal.
“Con este presupuesto pretendemos mantener todos los servicios públicos, la inversión social, hacer frente a las inversiones necesarias, aunque estas hayan disminuido, y paliar, dentro de nuestras posibilidades, los problemas de empleabilidad de nuestra ciudad”, apuntó el concejal de Hacienda, Luis Moya.
Así, la inversión que el Ayuntamiento realizará, en materia de empleo, asciende a 1.408.000 euros, repartidos en cuatro pilares, como son el Plan de Empleo Local (que se sitúa en 450.000 euros), la iniciativa de empleo juvenil a través del convenio con la Escuela de Organización Industrial (128.000), acciones formativas locales (108.000), el Plan Provincial de Obras y el PEFA (650.000). “En realidad, la inversión en empleo va a ser de casi 4,5 millones de euros porque a ese 1,4 hay que sumar otro millón de la Escuela de Organización Industrial y los dos millones de la Junta de Andalucía para los planes de empleo del +30 y el -30”, apuntó Luis Moya.
La previsión de ingresos para este año se sitúa en 47.076.292,70 euros, divididos en impuestos directos e indirectos, tasas y otros impuestos, transferencias corrientes, ingresos patrimoniales y transferencias de capital. El grueso de esos ingresos, un 48%, corresponde a transferencias corrientes —la participación de tributos del Estado, la Junta de Andalucía y transferencias de la Diputación Provincial a través del convenio de Bomberos—; el 38% de lo que recauda el Ayuntamiento procede de impuestos directos —IBI, impuestos sobre vehículos o actividades económicas—; otro 11% se extrae de tasas y otros impuestos, como la ocupación de vías públicas, las instalaciones deportivas o las escuelas infantiles.
En el apartado de gastos, el 40%, 20.295.277,97 euros, va destinado a bienes y servicios públicos, mientras que los gastos de personal suponen un 36% del total. Por áreas y concejalías, la que más dinero recibe es la de Gobernación, Régimen Interior, Economía y Hacienda, seguida de la de Infraestructuras y Servicios y Medio Ambiente y Ordenación Territorial. Las inversiones en obra y bienes han descendido, siendo las más cuantiosas las de vehículos de emergencia y seguridad, infraestructuras deportivas, plan de eficiencia energética, vehículo de infraestructuras, reposición de áreas de juegos infantiles y pavimentación de vías públicas. Con respecto a la deuda bancaria, a 1 de enero de 2016, se situó en 23.088.360,66 euros y la previsión es que, para finales del presente ejercicio, baje a 18.152.737,69 euros.
Luis Moya indicó que el importe concertado, desde 1997, es de 52.486.351,71 euros, mientras que el nivel de deuda actual alcanza el 56% del total. Para el concejal de Hacienda resulta positivo que, en estos años, no se ha necesitado concertar operaciones de préstamo, con lo que no ha aumentado la deuda, sino que ha bajado. Así, el Ayuntamiento dispone de más liquidez gracias a la amortización de esa deuda y, por lo tanto, tiene mayor posibilidad de prestar todos sus servicios sin riesgo de déficit.
El dirigente municipal indicó, durante la presentación del presupuesto municipal para el ejercicio económico de 2016, que la propuesta del equipo de Gobierno socialista “cumple con la regla de gasto y con el artículo 12 de la Ley Orgánica 2/2012 de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera”. Asimismo, Luis Moya indicó que el objetivo, para este año, es “cumplir con el periodo medio de pago”, de tal manera que se pueda reducir de los noventa días a los sesenta reglamentarios.
Una de las principales “bondades” del presupuesto económico para 2016 es, según Luis Moya, que se mantienen las inversiones para la prestación de los servicios públicos de la ciudadanía, sin aumentar la presión fiscal de los linarenses. Además, el edil insiste en la “rigurosidad” que se ha tenido en cuenta a la hora de calcular los ingresos y los gastos: “Uno de los mayores errores es caer en el déficit, así que hemos pretendido ir casi al céntimo para evitar, así, la liquidación negativa que hubo en 2014”, dijo.
El concejal de Hacienda confía en el que el presupuesto reciba el apoyo del resto de formaciones y pueda entrar en vigor “en un mes”. Pese a ello, lamenta que los grupos de la oposición “no planteen sus respectivas propuestas, sino que se limiten a esperar la propuesta del equipo de Gobierno para ver qué se le enmienda o se le cambia”. “Lo normal es que cada uno mande sus aportaciones y demuestre sus ideas; seguro que critican que no han tenido tiempo suficiente, pero es una excusa”, apuntó Moya.