Un adiós a los franciscanos

La escasez de vocaciones conlleva el próximo traslado de los padres franciscanos, que hasta la fecha se encontraban en el Santuario de la Virgen de Linarejos. Así lo anunció el obispo de la Diócesis de Jaén, Ramón del Hoyo López, que agradeció su presencia durante tantos años, al tiempo que manifestó que trabajan en la búsqueda de alternativas para que el templo continúe su actividad.

29 jul 2015 / 10:41 H.

 

“En septiembre se producirá su marcha. Entonces tenemos que pensar la fórmula para que el centro quede bien atendido”, explicó. Para ello, cuentan con el apoyo de los diferentes párrocos de Linares en lo que se refiere a los cultos, con la cofradía de la Virgen de Linarejos, que especificó que siempre están del lado de la comunidad, al tiempo que se encuentran en gestiones para la posible llegada de una comunidad de religiosas femeninas. En concreto, de Tenerife con las que ya mantuvieron contactos para que se implantaran en el asilo, siguiendo la voluntad que los Marqueses de Linares dejaron en su testamento. “Lo que nos gustaría es que al menos haya dos religiosas, lo que supondría que tendríamos que reforzar el tema de alarmas entre otras cuestiones, para que siempre haya quien abra y atienda el teléfono, además de que esté limpio. Y junto a los párrocos y la cofradía salvaríamos la situación”, indicó.

En principio, ya que por el momento no hay nada cerrado, la intención sería la de realizar el contrato por un año para ver cómo funcionaría. “También se puede plantear la posibilidad de que se implante un matrimonio de santeros. Pero lo que tenemos claro es que queremos una continuidad en la actividad del Santuario”, aseveró. Una cuestión que también ha retrasado las elecciones previstas en el seno de la cofradía hasta ver cómo quedaría la organización del templo. Mientras tanto, se encuentran en proceso de conocer los bienes del santuario, la comunidad y la cofradía “para tenerlo todo actualizado”. Son unas declaraciones que el obispo realizó previamente a la solemne eucaristía que presidió en el Santuario de la Virgen de Linarejos con motivo de la entronización de la reliquia de San Pedro Poveda, que quedó expuesta en una hornacina en el camarín de la patrona de Linares.

Fue entregada por Encarnación González Rodríguez, postuladora general de la institución teresiana, mientras que durante la eucaristía, en la que se dieron cita numerosos vecinos, la Coral Virgen de Linarejos fue la encargada de poner la nota musical. “Se trata de un acto muy interesante, puesto que coincide con el día en el que la iglesia universal celebra la Fiesta Litúrgica de San Pedro Poveda”. Así, consideró un acierto de la cofradía y el santuario.