Inteligencia emocional para ganar en respeto y tolerancia

La Escuela de Genios Safari Einstein organiza un taller para educar en valores

03 ene 2018 / 09:56 H.

La resolución de conflictos con el fin de encontrar una solución satisfactoria para ambas partes a través de la tolerancia. Este es el objetivo principal que se persigue con el taller de inteligencia emocional, que organizó la Escuela de Genios Safari Einstein, y en el que se desarrollaron una serie de actividades para los más pequeños en las inmediaciones del Pasaje del Comercio.

Se trata de una iniciativa que, en palabras de Beatriz Ayala, experta en la materia y autora de “Doce patas de grillo”, persigue potenciar “el desarrollo de la inteligencia emocional en los más pequeños con actividades organizadas en forma de juego”, ya que es la “mejor manera de aprender tanto para niños como adultos”. Así, se resaltan valores como “el respeto, la tolerancia y el aprendizaje”, que se enfocan a la “resolución de conflictos desde una perspectiva en la que todo el mundo encuentre una solución y esté satisfecho con ella”.

EDUCACIÓN. Beatriz Ayala es una linarense que vive en Ginebra. Allí se dedica a implantar la inteligencia emocional en el sistema educativo suizo. “Decidimos que es un factor muy importante, tanto o más que el propio cociente intelectual, algo que está demostrado. Las personas con una inteligencia emocional desarrollada son capaces de tener una visión de la vida más tolerante”, asegura Ayala sobre una serie de “estrategias” que, cada vez más, despiertan el interés tanto de los colegios como de los padres. “No depende tanto del sistema educativo como de encontrarte con un profesor que esté en el mundo de la inteligencia emocional y aplique actividades sobre el tema en el aula”, comenta la escritora. Además, confiesa que aún hay padres “reticentes” ante este asunto, aunque cuando “observan un cambio de comportamiento en los niños modifican su opinión sobre estas técnicas”.

“Hemos seleccionado varias dinámicas. Hay actividades sobre habilidades sociales, resolución de conflictos y autopresentación”, comenta Dolores Ruiz, cofundadora de la Escuela de Genios Safari Einstein. Además, los niños escribieron sus anhelos en un trozo de papel que colgaron de un árbol de Navidad. Eso sí, la única condición es que los deseos no fueran materiales. A través de esta actividad en concreto “se aprende que los sueños pueden cumplirse”. Finalmente, ataron los papeles a un globo y los soltaron para que estos llegaran al cielo.

Otro de los objetivos básicos de esta actividad es la sensibilización, un elemento clave para que esto deje de sonar extraño. Desde septiembre, momento en el que se fundó la escuela, organizan charlas en pos de la concienciación.

SENSIBILIZAR EN LA GESTIÓN DE EMOCIONES

La Escuela de Genios Safari Einstein se fundó en septiembre del año pasado. Desde entonces organizan conferencias en los colegios y dinámicas de grupo, tanto para niños como adultos, en las que pretenden sensibilizar y educar para hacer personas más fuertes, sin carencias y capaces de gestionar adecuadamente sus emociones en el ámbito social.