Al grito de una promesa incumplida y demandada

La lucha continúa. Así lo pensaron los cientos de manifestantes que se dieron cita frente a la Escuela Politécnica Superior de Linares, conocida popularmente como Peritos. La demanda, en este caso, era triple. Por un lado, alumnos y docentes de la Escuela de Idiomas protestaron por su “hartura” de estar de prestado. Y es que, desde que la delegada del Gobierno, Ana Cobo, informara de que el traslado era posible —porque ya se había dotado del presupuesto que hacía falta para ejecutarlo— hasta entonces, que sus integrantes continúan en la misma situación, pasaron más de dos años. La comunidad educativa está desesperada, que duda de que el acuerdo con la Universidad llegue a ser una realidad cuando ve que, con el paso del tiempo, y curso tras curso, nada ocurre.

Este desconsuelo lo viven también los miembros del instituto Santa Engracia, que comparten las instalaciones con el centro educativo Cástulo, sin tener un edificio propio desde hace una década y sin que nadie atienda a sus necesidades. Finalmente, la Federación de Asociaciones de Madres y Padres Los Olivos (Fampa), que agrupa a más de 230 asociaciones de la provincia, busca en Peritos también establecer su sede.

“Somos conscientes de que la Universidad ya le dio el visto bueno al convenio y estamos pendientes que lo firmen con lo Junta de Andalucía para que puedan empezar con las actuaciones de reforma del edificio. A grandes rasgos, desde 2016, que Yolanda Caballero y Ana Cobo anunciaron que ya todo estaba desbloqueado y se podría hacer el traslado, aún no se ha hecho nada. El sentido de esta concentración fue recordarle a la Junta que esta necesidad sigue existiendo y que estamos viviendo una situación muy crítica”, determinó José Luis Rodríguez, el portavoz de la comisión mixta “Pro Traslado”, que lleva organizada, desde 2015, como plataforma.

La llamada a la concentración no pudo ser más efectiva. La comunidad educativa del centro Santa Engracia, así como los miembros del conservatorio, se volcaron con este movimiento y se sumaron a la iniciativa reivindicativa, acompañados, además, de casi medio centenar de colectivos y asociaciones linarenses, que no quisieron faltar a este encuentro. Sindicatos, asociaciones de vecinos, colectivos sociosanitarios, grupos de padres y algunos partidos políticos acudieron también a apoyar a aquellos cuya paciencia sigue fuerte y no mengua ni se rinde con el paso del tiempo. “Hicimos una convocatoria a la ciudadanía de Linares porque entendimos que Peritos, aunque dependa de la Universidad, es patrimonio de Linares. Sería una aberración que, por deterioro del edificio, no se pudiera utilizar”, argumentó, en este sentido, José Luis Rodríguez.