“Sois para mí un ejemplo a seguir”

La cooperante jiennense Nazaret García Santiago le escribe una carta manuscrita a la comunidad “Dimas Rodríguez”, de El Paisnal (El Salvador). Mensajeros de la Paz Jaén ayuda a esta ejemplar comunidad de antiguos guerrilleros

10 oct 2017 / 14:12 H.

“Creo que este tipo de experiencias se deben contar de viva voz, pues nadie mejor que una misma para plasmar todas esas vivencias que llegan al alma.

El día que decidí que este sueño se hiciera realidad sabía que habría un antes y un después en mi vida. No todo el mundo tiene la posibilidad o las ganas de dar un paso más cuando se habla de cooperar, ya que no lo es conocer la cultura, la historia, las tradiciones y la realidad de otro país. Es llegar a formar parte de su día a día, es entender su realidad y abrazarla, es emocionarte con cada historia y hacerla tuya, porque es lo que sucede, porque después de una experiencia así, todo cambia. Y no sé el tiempo que durará, ojalá ésta sensación se quede conmigo siempre.

Pero si me preguntáis, ¿volverías a repetir ésta experiencia? Respondería que sin duda:

Siempre que se me olviden mis raíces, siempre que no sea capaz de agradecer todo lo que me ha dado la vida, siempre que me envenene de lo tóxico del día a día. Siempre que se me olvide lo maravilloso que es dar sin esperar nada a cambio, porque ellos lo hacen a diario. Siempre que se me olviden los motivos por los que seguir luchando, porque esos son los valores que allí me han recordado. Porque la seña de identidad de la que ha sido mi familia allí, es la lucha activa. Valores como el esfuerzo, la disciplina, la constancia, el tesón son los que intentan inculcar a los que les siguen. Ojalá que vuestro ejemplo (Luz, Dolores, Florentino, Francisco Javier, Sonia, Rita, Marisol...) siga latente en los más jóvenes, sois para mí un ejemplo a seguir.

Cuando llegué a la comunidad tan solo sabía de vosotros que erais excombatientes guerrilleros, pero no conocía lo que había detrás de cada una de vuestras vidas.

Dolores y Florentino, gracias por haber compartido conmigo vuestra maravillosa historia de supervivencia, de amor, de respeto y de admiración. Estoy segura de que algún día vuestra biografía será contada al mundo. ¡Debe de ser escuchada! Francisco Javier sé que te encargarás de ello. Sonia, gracias por abrirme las puertas de tu casa y hacerme sentir una más de tú maravillosa familia. Rita y Marisol, sois un ejemplo de que se puede, con esfuerzo y constancia se consigue todo lo que uno se propone. Podría seguir nombrando a gente extraordinaria de la que he aprendido muchísimo durante mi estancia allí, pero me faltarían hojas.

Luz, no me he olvidado de ti. Solo decirte gracias por hacer posible este sueño y por desempeñar la labor que desempeñas dentro de la comunidad, porque con mujeres como tú, el mundo cambiaría.

Cuando se tomó la decisión de que fuera a El Salvador y en concreto, a la Comunidad “Dimas Rodríguez”, no sabía lo que el destino me depararía, pero tú sí sabías todo lo que ellos podían aportarme. Gracias Julio por esa acertada decisión, te estaré agradecida siempre. Gracias a Mensajeros de la Paz por permitirme vivir una experiencia como esta”.