Voces por un conservatorio seguro

Urgencia y rapidez en la intervención. Los miembros de la ampa del Conservatorio Profesional de Música (CPM) “Ramón Garay” y los alumnos del Superior (CSM) exigen una inmediata intervención de las administraciones competentes en el edificio que acoge las clases de ambas formaciones. Como si los sonidos de los instrumentos que aprenden a tocar los estudiantes hubieran “dado vida” a los materiales de la construcción, las baldosas de los suelos y las paredes “se desplazan” ante el temor de las familias que llevan a sus hijos. Sin embargo, esta peligrosa situación no es nueva, pues sufren los desperfectos desde hace años. El motivo lo explica la presidenta de la ampa del “Ramón Garay”, Mónica Alcázar: “Es un edificio muy sobrecargado, de ahí que salgan grietas”. Fue el pasado 29 septiembre, recuerda Alcázar, cuando el deterioro se agudizó. “Los suelos están levantados y hay clases hundidas”, apunta la representante.

Ante tal situación, los progenitores del “Ramón Garay” y los alumnos del CSM se movilizaron para alzar sus voces y llegar a una inmediata solución, después de los acuerdos tomados en la reunión mantenida el pasado lunes, día 3. Así, desde la ampa se organizaron para recoger firmas. “En una tarde llevamos unas doscientas. Con esta medida exigimos una reubicación urgente de la aulas para la continuidad de las clases. Hay zonas peligrosas y los niños que van lo hacen con miedo, de hecho, cada vez hay menos alumnos en las clases”, asegura Mónica Alcázar. Otra de la movilizaciones acordadas será llevar las rúbricas a la Delegación de Educación, responsable de las formaciones musicales, así como a la Subdelegación del Gobierno, que es la propietaria del edificio de la calle Compañía. Asimismo, adjuntarán un escrito explicando su petición. La información de las exigencias de la comunidad educativa será divulgada por medio de una octavilla.

Por su parte, alumnos del Conservatorio Superior de Música se manifestaron en la entrada del edificio antes de entrar a sus clases, como gesto reivindicativo ante el mal estado de la construcción.

La presidenta de la ampa recuerda que hay miedo entre los padres y madres; y es que hay muchas familias que llevan a más de un hijo. “También vamos a convocar un consejo escolar urgente con el objetivo de llegar a toda la comunidad”, explica Alcázar, quien recuerda que están a la espera de que la delegada de Educación, Yolanda Caballero, les conceda una cita. “Si no obtenemos respuesta alguna, saldremos a la calle”, asevera.

Esta decadencia del edificio es alertada desde hace años, sobre todo, cuando se pusieron en marcha las enseñanzas superiores, pues aumentó el número de visitantes. La continua espera para el traslado del Conservatorio Superior de Música a una nueva sede se ha convertido en una gota que, poco a poco, cala y hace daño a un edificio saturado de alumnos y profesores. La construcción en la que se imparten las enseñanzas fue colegio y residencia de la Compañía de Jesús entre los años 1614 y 1767. A partir de ese momento, el edificio se convirtió en Monte de Piedad y Reales Estudios de la Concordia. Más tarde, fue convento de agustinos y después Colegio de Humanidades de Nuestra Señora de la Capilla. Finalmente, en el siglo XIX, acogió un Instituto de Segunda Enseñanza, la Escuela de Magisterio, el Museo de Pinturas, una Biblioteca Pública y el actual Conservatorio Oficial de Música.