Una “fábrica de sueños” para niños con cáncer

Pídeme la luna y te la intentaré alcanzar, con tal de que tus sueños se hagan realidad”. Ese es el lema del colectivo que preside Marisol Escribano, cuyo principal objetivo es hacer que se cumplan las ilusiones de los niños ingresados en la Unidad de Onco-Hematología del Hospital Infantil, por difíciles que sean, y devolver a sus caras una sonrisa tras sus largos periodos de hospitalización. Este mes de octubre, “Pídeme la Luna” cumple sus primeros cinco años en activo, que conmemorarán el próximo 12 de noviembre en Arjona, aunque la labor de Escribano arrancó hace 25 años: “En este tiempo hemos tenido una actividad frenética y resultados mucho mejores, arropados en todo momento por el cariño y la generosidad de tanta gente de Jaén y de otras ciudades. Esta fábrica de sueños no puede parar”.

En un principio no esperaban la acogida que tendrían sus propuestas: “Se han superado todas las expectativas. Siempre pensábamos que, al tratarse de niños, la gente se volcaría, pero no imaginábamos que tanto. Merece la pena que cada uno aporte su granito de arena para ver esas bonitas sonrisas”. Así, los voluntarios del colectivo se sorprenden, reconoce, cada día, de cómo les quiere y arropa la gente. “A menudo surgen iniciativas bonitas para ayudarnos desde cualquier punto de la provincia. Conciertos, desfiles de modelos, campeonatos o musicales, como el que celebraremos en breve, en el Infanta Leonor, titulado ‘Cenicienta y el zapatito de cristal”. Iniciativas que permiten al colectivo recaudar fondos para cumplir los sueños de los pequeños, que son, puntualiza Escribano, de lo más variado. Ilusiones para que sonrían y que se les olvide, aunque sea por unos instantes, que se encuentran enfermos.

La última ilusión satisfecha fue la de comprar un ordenador a un pequeño de 5 años y un coche eléctrico teledirigido a otro de 2. Otras se centran en acercar a los pequeños a sus ídolos, con la reciente visita a los jugadores del Fútbol Club Barcelona y a David Bisbal durante su actuación en la feria de Linares. A ellos se suman las aspiraciones colectivas, como la de nadar con delfines, pasarlo en grande con el musical “El Rey León” o visitar el Oceanografic y el Bioparc de Valencia. Siempre van acompañados de sus familiares, que disfrutan al contemplar las sonrisas que se dibujan en el rostro de los pequeños.

“Pídeme la Luna” cuenta, en la actualidad, con representación en Arjonilla, Andújar, Begíjar, Lupión, Bailén, Arjona, Torredonjimeno y Martos, entre otros municipios, y su labor es tan importante que el reto de la asociación es llegar a otros hospitales. “Ese es nuestro gran objetivo, y en la actualidad se está implantando en Granada y en Plamplona hay otro proyecto para empezar. No es tan fácil, porque hace falta un grupo de gente que quiera lanzarse a acometer tan sacrificada pero, al mismo tiempo, satisfactoria labor. Pero, con ilusión, es posible traspasar fronteras”, manifiesta Marisol Escribano. También se han dado pasos, en ese sentido, en Valencia. Una iniciativa que, recuerda, surgió de manos de las enfermeras de Oncología: “Somos pioneras. No había asociación en España que hiciera esta labor”. También forman parte del colectivo médicos, auxiliares de enfermería, estudiantes de Medicina y Enfermería, farmacéuticos y personal sanitario, así como numerosos padres y madres de niños de la provincia y muchos voluntarios dispuestos siempre a dar lo mejor por ver felices a los niños.