Una cuestión de supervivencia

A poco más de dos euros y nueve céntimos se pagaba ayer el kilo de aceite de oliva virgen extra. Son casi treinta céntimos menos que hace un par de semanas. Una “ruina” para los olivareros y, por consiguiente, Jaén. No hay solución para la crisis de los precios. Todo lo contrario. Cada día que pasa, el desastre empeora. Y no es una cuestión meramente económica, sino que tiene que ver con la generación de empleo, la lucha contra la despoblación y la identidad de este mar de olivos. Las organizaciones agrarias Asaja, Coag y UPA, las Cooperativas Agroalimentarias e Infaoliva escenificaron la gravedad de la situación. El sector oleícola se une por el futuro de Jaén. Y volverá a mostrar esa unidad de acción el próximo miércoles en la calle, con una gran concentración, convocada en la Plaza de las Batallas, ante la Subdelegación de Gobierno y la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía. La previsión es que acudan más de 5.000 personas, aunque los organizadores hacen un llamamiento a la participación masiva: “La defensa del olivar, de nuestro aceite y de Jaén es cosa de todos”, insisten.

La protesta del día 29 será la primera de un calendario de movilizaciones mucho más amplio, que incluye vías de diálogo y negociación con las administraciones y, también, nuevas protestas en la calle. El objetivo de los colectivos agrarios, de los industriales almazareros y de los cooperativistas es poner freno “a la irracional e ilógica” caída de precios en origen del aceite de oliva, además de reclamar a la Junta y al Gobierno central el apoyo y la puesta en marcha de los mecanismos que estén a su alcance para que haya una estabilidad en el mercado.

El presidente de Infaoliva Jaén, Manuel Alfonso Torres, afirma: “Venimos avisando desde hace tiempo de la situación que tienen los precios del aceite. El olivar de Jaén es el más damnificado, porque estamos en peores condiciones competitivas. El olivar no es solo el aceite, es cultura, es fijación de personas al territorio, es una forma de vivir, de entender el campo y de cuidar uno de los bosques más extensos del mundo, y todo eso tiene que ser puesto en valor”.

El presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Jaén, Higinio Castellano, señala: “Acudimos los cinco con una finalidad muy clara, la unidad de la producción. Tenemos que ir unidos, unidos y unidos. Esto no va a ser cosa de un día, ni de dos ni de tres, ni creo que de un año; va a ser un trabajo de bastante tiempo. Hay que defender el olivar, porque es la única fuente de valor que tiene la provincia de Jaén”.

Luis Carlos Valero, gerente y portavoz de Asaja, concreta: “Quiero destacar un hecho muy importante y es que hemos completado el triángulo inicial con la participación de Infaoliva y Cooperativas. Espero y confío en que a partir de la concentración empiecen a subir los precios del aceite, porque estamos en una situación de catástrofe. No es una situación nueva, esto Jaén lo ha vivido demasiadas veces. ¿Cuántas veces hemos tenido que ir a al almacenamiento privado? Por lo menos en dos años o tres”.

El secretario general de Coag Jaén, Juan Luis Ávila, expone: “Creo que la situación que tenemos sobre la mesa nos trasciende. El problema es tan serio y la situación se está complicando por días que estamos obligados a ir de la mano para intentar solucionar esto y con el paquete de medidas que hemos puesto sobre la mesa se puede conseguir un cambio estructural, que nos permita no perder casi mil millones de euros en el sector nacional del aceite de oliva, un sector socialmente muy bien estructurado y que es un dinero que dejan de entrar en las zonas productoras que es para la sociedad en torno a la cultura del olivar, a nuestros pueblos”.

Por último, el secretario general de UPA Jaén, Cristóbal Cano, concluye: “Hay que poner en valor esta unión de las cinco entidades, que somos los legítimos representantes de los agricultores. Tenemos un papel activo en distintas mesas de interlocución a nivel provincial, andaluz, nacional y en Bruselas”.