Un robo en la casa de El Abuelo

Miguel Ángel G. J., supuestamente, accedió al Camarín de Nuestro Padre Jesús, el pasado 14 de febrero, sobre las diez de la mañana. Sin levantar sospecha alguna, se dirigió al presbiterio y, en un descuido, cogió la cajita de plata, en la que están guardadas las llaves del mismo material que abren el sagrario. Después se dirigió a la capilla donde está la Virgen de los Dolores y, tras mirar a un lado y a otro, cogió uno de los candelabros que alumbran la imagen, partió la vela, para que ocupara menos espacio, y se la guardó en la chaqueta. A los pocos minutos, se marchó, tal y como explica Ricardo Cobo, hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Jaén, una de las más veneradas de España. Es lo que captaron hasta tres cámaras de seguridad instaladas en el santuario de El Abuelo. El caso llegó a la Comisaría y comenzó una investigación, de la que se encargó el grupo de Delincuencia Urbana de la Policía Judicial y la Brigada de Policía Científica. Con las pruebas recogidas, lograron identificar al presunto autor, que fue detenido en su domicilio, donde se recuperó la llave del sanctasanctórum.

El arrestado, que ya fue puesto a disposición de la autoridad judicial, vive en un popular barrio de la capital y le constan media docena de detenciones, según fuentes del Cuerpo Nacional de Policía en Jaén, las tres últimas por violencia machista. La sustracción, como informa la Comisaría en una nota, se descubrió después de una eucaristía. El sacerdote pidió las llaves de la custodia y, al no encontrarlas, en un primer momento, se pensó que se habían extraviado. Al día siguiente, un responsable de la cofradía buscó por todo el templo en busca del recipiente de plata, que no encontró y, además, se dio cuenta de que faltaba un candelabro. Así se descubrió el robo y la hermandad puso los hechos en conocimiento de los policías. El hermano mayor explica que, para presentar la denuncia, acudieron a expertos que tasaron el valor de las dos piezas afanadas. En el caso de la caja con las llaves, el valor es de unos 200 euros aproximadamente, y, en el caso del portavelas, ronda los 350, como precisó el responsable de la hermandad jiennense. Con esta peritación, el posible autor podría enfrentarse a pena de entre uno y tres años de prisión por estos hechos.

La cofradía confirma que, eso sí, no hay que lamentar daño alguno en la casa de Nuestro Padre Jesús y confirma que se trata de un hecho aislado, extremadamente raro en el Camarín por el que, a diario, pasan cientos de personas. Se da la circunstancia de que el altar de la Virgen de los Dolores, actualmente, está ocupado por la Virgen del Carmen, trasladada por motivo de la Cuaresma. La Policía Nacional continúa con la investigación de lo ocurrido, con el objetivo de localizar todas las piezas hurtadas. Lo ocurrido en el santuario de la Carrera de Jesús recuerda al robo, cometido hace aproximadamente un año, en el convento de la Comunidad de Religiosas Franciscanas, conocidas como Las Bernardas. En aquella ocasión, la Policía Nacional también logró arrestar al presunto autor, conocido también por su historial delictivo. En aquella ocasión también se robó la custodia que apareció deteriorada.

Por otro lado, ayer fue puesto a disposición judicial un hombre presunto autor de un delito de malos tratos, que, tras prestar declaración en la Comisaría, fue traslado ante su señoría, tal y como confirmó la Policía Nacional.