Un fuerte aplauso por un cuarto de siglo de lentos y grandes pasos
La sociedad celebra los 25 años de vida del colectivo con una emotiva gala
Sus ojos rasgados la observaban con un brillo especial. No es el mismo con el que le dijeron que ya sabían leer, que habían hecho la cama solos, que aprobaron un examen o que, por fin, lograron el anhelado título de la ESO. Los hombres, mujeres, jóvenes y pequeños con síndrome de Down que acudieron a la gala con la que celebraron el 25 aniversario de su existencia devolvieron a sus madres y padres la entrega y pasión que les dedicaron desde que nacieron.
Con un calor que tan solo se halla en el seno de una familia, la asociación puso el broche final a un año de celebración. Un encuentro en el que el colectivo reconoció a todos los que aportaron su granito de arena desde que vio la luz en noviembre de 1991. Entre el correteo de algunos niños alrededor de las sillas y el orgullo de unas familias que lo dieron todo por sus retoños, en la gala, presentada por el director de Diario JAÉN, Juan Espejo, y el humorista David Navarro, se entregaron múltiples premios a representantes municipales, a centros educativos, a entidades bancarias, a medios de comunicación, a profesionales que trabajan en la organización, a empresas, a entidades deportivas, así como a las fundadoras de la asociación y los integrantes de la primera junta directiva.
Sin palabras dejó a los asistentes la porcunense Paula González, de 16 años, quien expresó con una grandiosa sencillez, la historia de su vida —la de sus compañeros— en la que explicó los “extras” que suponen para ellos lograr lo que otras personas, a veces, ni valoran. “Me cuesta trabajo entender, pero me esfuerzo al máximo”, dijo.
El rockabilly de los Condensadores de fluzo se metió en la piel del público y levantó a los chicos para bailar “Por qué te vas” de Jannete y una original y sorprendente versión del himno de Jaén. Pronto se unieron para recorrer, en un tren improvisado, el recinto. Después de la marchosa actuación, continuó la entrega de galardones, hasta que, antes de que la presidenta cerrara el acto con la invitación a un cóctel, los presentadores le quitaron el micrófono para anunciar una última sorpresa, en esta ocasión, para Gómez. De pronto, los chicos con Down subieron uno por uno al escenario y le entregaron 25 rosas a su “Lola”, totalmente emocionada. Por último, sobre las tablas, el grupo se unió para cantar el tema “Gente” del Sueño de Morfeo.
pioneras. Durante la gala, las primeras mujeres que fundaron la asociación jiennense (María Dolores Gómez —actual presidenta—, María Jesús Rodríguez —que no pudo asistir a la gala—, Antonia García, Marisa Gallardo y Ana Cárabe) recibieron un emotivo homenaje. Sus hijos e hijas subieron al escenario para entregar, cariñosamente, los premios a sus madres.
El presidente de DIARIO JAÉN S. A., Eleuterio Muñoz, recogió el premio de la asociación de manos de Blanca Garrido. Con el galardón, el colectivo reconoció al periódico por reflejar en sus páginas la vida de las personas con síndrome de Down.
La presidenta de la Asociación Síndrome Down, María Dolores Gómez, destacó la lucha de las familias por un mejor futuro de sus hijos. “Nuestras joyas. Cada uno con su forma de ser y que se esfuerzan cada día en una gran batalla”, subrayó Gómez. La representante del colectivo insistió en la importancia de que los padres y madres den la oportunidad a sus hijos “down” de acertar y equivocarse para que se abran camino.
La presidenta hizo un recorrido por la historia de la asociación a través de su propia vida. “Cuando nació mi segundo hijo, Ángel, me puse en contacto con otra madre, María Jesús Rodríguez, que es mi alma gemela”, contó. Gómez hizo visualizar al público cómo se celebraron las primeras reuniones en una cafetería, que luego pasaron a ser alrededor de la mesa camilla de su casa. “Y en un frío día de noviembre de 1991 arrancó la asociación. Entonces no éramos conscientes de lo que teníamos entre manos, pero sí de la responsabilidad que teníamos”, reflexionó.
En un camino lleno de nuevas experiencias, María Dolores Gómez hizo hincapié en la primera subvención que recibió la organización de 500.000 pesetas, los programas educativos, los profesionales involucrados o la apertura de un aula de extensión en Úbeda. “Y también llegó la primera pérdida con Iván”, dijo. En su discurso, la presidenta recordó la implicación de todos los sectores de sociedad e insistió en la “dura batalla que queda por hacer”, especialmente para la integración laboral de los “Down”