Trabajadores se quejan de los colapsos en Urgencias

Aseguran que dejan hasta seis camillas en la sala de espera interna

22 dic 2016 / 10:01 H.

Los trabajadores del servicio de Urgencias del Hospital Médico-Quirúrgico denuncian el “caos” que se vivió el pasado lunes por la noche. Según avisaron los empleados, hasta seis camillas con pacientes se acumularon en la sala de espera interna y tres en el pasillo de entrada, ante la desesperación de los familiares y la impotencia de los profesionales. La causa de este desbarajuste se halla, según los trabajadores, en la reducción del personal en esta área del hospital. “En este mes, en lugar de estar seis celadores, hay cinco. La dirección nos alega que no hay tanto trabajo, aunque es precisamente en diciembre cuando más picos hay”, explica a este periódico una trabajadora. A esta situación, la empleada añade otro problema: “El servicio de radiología de Urgencias lleva averiado desde hace una semana, por lo que los usuarios que lo necesitan tienen que subir a otra planta con el aumento de tiempo que ello conlleva”, indica la mujer.

Aunque el colapso se produjo entre la noche del lunes al martes, los trabajadores aseguran que llevan así todo el mes y que, de media, se llegan a meter unas dos o tres camas en la sala interna de espera de Urgencias. “Se trata de personas mayores que llegan en sillas de ruedas y a las que no les hace falta suero y que las dejan en espera sobre estas camillas que son malas”, dice la empleada. Asimismo, indica que las familias se pueden llegar a tirar entre las cinco y las once de la noche hasta que los atienden.

Ante tal situación, una trabajadora del servicio sanitario indica que sus compañeros del cuerpo de enfermeras, auxiliares, administrativos y celadores son las primeras personas a las que los pacientes y familiares expresan su malestar. Quejas que llegan al insulto. “Cuando llevan tanto tiempo en espera nos comen. De hecho, hace poco, un usuario le dijo a una enfermera que era una perra”, asegura la integrante de la plantilla. Los ataques a este personal llegaron hasta el punto de que tuvieron que llamar a seguridad porque unos familiares se metieron en una consulta por su cuenta. “Luego con los médicos se ponen más suaves”, dice.

La empleada subraya que están “hartos” de hacer escritos a la dirección del centro para que tenga constancia del problema y no reduzcan personal. “Nos sentimos impotentes, pues nos insultan, aunque los entendemos, de todos modos, sabemos que, cuando están a la espera, su urgencia no es grave”, asevera la mujer, quien recuerda el “mal uso” que mucha ciudadanía realiza del servicio. “Algunos, como saben que les harán una radiografía sin tener que ir al especialista, prefieren pasar por Urgencias en lugar de ir a su centro de salud”.

Consultada por este problema, la delegada de Salud, Teresa Vega, niega que haya colapsos en Urgencias y destaca la “fluidez” del servicio. “Hoy [por el martes] he estado allí por la mañana y había 70 camas libres”, indicó. Así, insiste en que hay menos afluencia a este servicio respecto a otros años. “El dispositivo está bien adaptado”, manifestó Vega.

delegación

ciclos . Indica la delegada de Salud, Teresa Vega, que si en algún momento hay picos de trabajo en Urgencias, está relacionado con el ciclo económico o social, como por ejemplo, en la campaña de la aceituna.

organización. Vega insiste en que no se ha reducido personal. “Las plantas hospitalarias están con sus equipos completos y los cuadrantes están funcionando”, dice la delegada.