“Rescatados” al borde de un barranco en Cazorla
Los turistas, de nacionalidad alemana, se perdieron como consecuencia de un error del GPS de su automóvil
Unos turistas de nacionalidad alemana se pierden en las inmediaciones de Cazorla como consecuencia de un error de programación del GPS del coche en el que viajaban. De hecho, el vehículo tuvo que ser rescatado por la Policía Local, al filo de un barranco. Las víctimas tuvieron que abandonar el automóvil y llegar a pie hasta un hotel de la zona, donde pasaron la noche. Fueron los responsables del establecimiento hotelero los que avisaron a las autoridades de que unos clientes se habían extraviado cuando trataban de llegar a las instalaciones por la zona del Carril del Solar. Los agentes localizaron el vehículo en la ermita de Santo Bastián. Se encontraba en un carril, muy cerca de un peligroso barranco.
Las labores de rescate del automóvil se alargaron durante varias horas como consecuencia de la dificultad del terreno. De hecho, los agentes, tuvieron que sacar el coche marcha atrás en una maniobra muy complicada. La Policía Local contó con la ayuda de una empresa de grúas del municipio.
No es la primera vez que los errores del GPS originan complicaciones de este tipo en Cazorla. El marzo del año 2017, una caravana quedó literalmente encajada en una calle del municipio, sin poder avanzar ni retroceder. En aquella ocasión, el conductor no hizo caso a la señalización de tráfico. Se dejó guiar por la aplicación informática, lo que provocó que quedara atrapado en el Balcón de Zabaleta. El atasco que se originó en el acceso al casco antiguo cazorleño fue más que notable. Gracias a la rápida intervención de los agentes, se pudo sacar el vehículo de ese lugar y restablecer la circulación en la zona.
La Policía Local de Cazorla aconseja que, antes de seguir las instrucciones del GPS, se debe hacer caso a la señalización, tanto horizontal como vertical. Al respecto, aseguran que este tipo de aparatos suelen ser útiles, siempre y cuando estén actualizados y se realice un buen uso. Además, en zonas rurales, suelen presentar más lagunas y, por consiguiente, aumenta la posibilidad de sufrir un “fail”, tal y como se conocen en el argot estos errores de las aplicaciones de localización.