Queda en libertad el acusado de violar a una joven en la feria

Sergio R. M., el vecino de Granada detenido el domingo como presunto autor de una agresión sexual a una joven en el ferial, ya se encuentra en libertad. Eso sí, con cargos. La juez que investiga los hechos, la magistrada Carmen Ballesteros, dictó ayer un nuevo auto en el que revocaba su decisión de mandarlo a prisión y que había adoptado apenas 24 horas antes. La medida llegó después de interrogar a la supuesta víctima, una joven estudiante extranjera, y a los cuatro vigilantes que presenciaron la escena y que retuvieron al presunto autor de los hechos. Todos ratificaron lo que ya habían dicho en Comisaría y ratificaron su versión.

El giro de los acontecimientos es, por lo tanto, sorprendente. La detención de Sergio R. M. se produjo alrededor de las siete y media de la mañana del domingo. Fue, entonces, cuando los vigilantes escucharon fuertes gritos que procedían de una zona de pinar del recinto ferial. Al llegar al lugar, vieron a una pareja manteniendo relaciones sexuales. Así lo declararon a la Policía y así lo confirmaron ayer en su declaración judicial. Pensaron que el hombre estaba forzando a la chica y le recriminaron su actitud. Ella, que estaba completamente desnuda, comenzó a gritar. Él salió corriendo. Los vigilantes consiguieron interceptarlo y retenerlo hasta que llegó la Policía, que procedió a su arresto.

La joven tan solo fue capaz de contar que había conocido a Sergio R. M. en la madrugada del sábado al domingo, pero que no recordaba nada de lo que le había sucedido. Ayer, le contó lo mismo a la juez del caso. Fue llevada a un centro sanitario para una exploración, que determinó la existencia de una relación sexual. Eso sí, no había signos de violencia. Tampoco sus ropas estaban rotas o desgarradas, según confirman las fuentes consultadas.

Sergio R. M. pasó a disposición judicial el pasado lunes. A pesar de que había cuatro testigos que lo vieron mientras mantenía sexo con la mujer, el procesado lo negó. Rechazó cualquier contacto sexual y dijo que se encontraba haciendo sus necesidades en la zona de pinar donde fue sorprendido por los vigilantes. Alegó que salió corriendo porque se asustó y reiteró, una y otra vez, su inocencia. Sin embargo, la juez no creyó su versión y decidió enviarlo a prisión preventiva a petición de la Fiscalía. Fue una decisión inesperada, ya que la víctima ni tan siquiera había presentado denuncia y no acusó a Sergio R. M. de haberla forzado. Ella tan solo asegura que no recuerda nada. Ayer, y tras la ronda de declaraciones a los testigos, la magistrada revocó su medida anterior y decidió dejar en libertad al presunto autor de los hechos. No le impuso medida alguna, según confirman las mismas fuentes. El caso está ahora a la espera de que lleguen las pruebas de ADN y de los análisis de sangre realizados a la chica para comprobar si presenta en su organismo algún tipo de sustancia que anulara su voluntad.