La UPM llevará el nombre del regidor Ramón Calatayud

Reconocimientos a Honorato Morente Mejías y La Económica

28 feb 2018 / 10:51 H.

La Corporación Municipal celebró un pleno “como los de antes”, con 44 puntos en el orden del día, más uno introducido de urgencia, para aprobar las tarifas de inserciones publicitarias en la radio televisión municipal. Comenzó a las nueve y media de la mañana, con un minuto de silencio en memoria del fallecido Manuel Anguita Peragón, que fue concejal por el PCE en la primera legislatura democrática, y se prolongó hasta casi las seis de la tarde, aunque hubo un receso. En medio del sinfín de reconocimientos extrajudiciales de crédito, algo habitual sesión tras sesión para pagar facturas pendientes, hubo decisiones de calado, como la de rebautizar la Universidad Popular Municipal (UPM) en honor de Ramón Calatayud, alcalde en la fase final de la dictadura franquista y que, con la Ley de Memoria Histórica en la mano, no tiene que dar su nombre a una institución. La concejal de Cultura, Isabel Azañón, defendió la decisión por el respaldo social obtenido y porque parte del periodista Antonio Garrido, aunque la haga suya el Gobierno local. En cuanto a que se trate de un regidor del régimen, Azañón juzgó que él no tuvo culpa de haber nacido cuando nació y defendió que se ensalza a la “persona”, al igual que ocurrió con el médico y político Juan Pedro Gutiérrez Higueras, que tiene una calle. La concejal no adscrita, Salud Anguita, militante de VOX, que defendió la propuesta, juzgó que, al vetar homenajes como el de Calatayud, “se mantiene una herida abierta” y dijo que, con la izquierda, “Franco está más vivo que nunca”.

Manuel Montejo consideró que la idea de renombrar la UPM genera un “debate estéril”, recomendó al equipo de Gobierno que si quiere impulsar un homenaje a Calatayud, que busque otra fórmula distinta y acusó al PP de “lanzar un mensaje a determinados votantes”. “No necesita nombre, es precioso el que ya tiene, es querido por todos. Tengo que pedirle que deje el punto sobre la mesa, porque sé que está pasando un marrón”, le dijo Manuel Fernández a Isabel Azañón. Finalmente, el asunto se votó y fue aprobado por el PP, los tres concejales no adscritos y tuvo el rechazo de Jaén en Común y el PSOE. Este último ya pidió a la Junta que, a través de la Dirección General de Memoria Democrática, tome medidas y deje sin efecto el nombramiento. Uno de los hijos de Ramón Calatayud siguió el debate en el salón de plenos y, posteriormente, mantuvo un breve encuentro con el alcalde, Javier Márquez. Menos dudas generaron otras dos distinciones aprobadas, como la de entregar la Medalla de Oro de la Ciudad a la Real Sociedad Económica de Amigos del País y la de dedicar un tramo de la calle Federico Mayor Zaragoza a Honorato Morente Mejías, empresario y presidente del Club Balonmano Jaén en su época más brillante. Eso sí, a la socialista María del Mar Shaw le llamó la atención que salgan adelante estos gestos y otros esperen en el cajón.

Breve reunión entre el alcalde y la exalcaldesa

El alcalde, Javier Márquez, dejó por unos minutos la presidencia del pleno para reunirse con su antecesora en el cargo, la socialista Carmen Peñalver. Ni uno ni otro dieron detalles del encuentro “privado” que, eso sí, llega tras conocerse que la exregidora está investigada en el “caso tranvía”.

El tranvía en Sevilla y en la Plaza de Santa María

El consejero de Fomento y Vivienda, Felipe López, aseguró en el Parlamento andaluz que la propuesta planteada por la Junta y la Diputación al Ayuntamiento de Jaén para poner en servicio el tranvía es “razonable, sensata y equilibrada” y mostró su confianza en la próxima reanudación de los trabajos de la comisión técnica, prevista para el día 12 de marzo, de forma que espera que “en muy breve tiempo” pueda funcionar el tren ligero. “No será difícil alcanzar el acuerdo con el Ayuntamiento, pues la deuda está siendo liquidada trimestralmente”, dijo y apuntó que la reunión mantenida la semana pasada en Jaén, en la que participaron él, la consejera de Hacienda, María Jesús Montero; el alcalde, Javier Márquez, y el concejal de Hacienda, Manuel Bonilla, no será la única para reactivar este medio de transporte. El diputado del PP Miguel Ángel García Anguita, exconcejal jiennense, juzgó: “Las mismas veces que he dicho que no era bueno el tranvía, las mismas veces he dicho que, una vez hecha la inversión, se debe poner en marcha” y, además de asegurar que estará encantado de subirse en este transporte cuando vuelva a funcionar, consideró que se está muy cerca de llegar a un compromiso que rentabilice la inversión. La diputada de Podemos Carmen Molina, que defendió la idoneidad de que el sistema tranviario eche a andar, aprovechó para reclamar que no salga fuera de la ciudad la estación intermodal, tal y como pretende el equipo de Gobierno. El diputado de Ciudadanos y líder de la fuerza naranja, Juan Marín, mostró su satisfacción por el anuncio de la Administración andaluza, que dice que pronto echará a andar el tren ligero, aunque consideró que los 2,1 millones que se estiman necesarios para la puesta a punto del tranvía es un “importe extra que habrá que encajar”. El socialista, Julio Millán, también se mostró complacido de que se limen asperezas entre la Junta y el Ayuntamiento. Casi al mismo tiempo, en el Ayuntamiento, también se debatía sobre el tranvía. El concejal no adscrito, Iván Martínez, defendió, a través de una moción, que fue respaldada por el PP y los otros dos ediles sin grupo de la Corporación, que la gestión de este transporte sea externalizada, incluso, se dejó entrever que lo gestionara la adjudicataria de los autobuses urbanos. El PSOE pidió que sea el propio alcalde, Javier Márquez, el que lleve al pleno propuestas sobre el tranvía.