La Junta aclara que asumirá el 40% del arreglo del tranvía
Se compromete a pagar el estudio de asistencia técnica para analizar el estado real de la infraestructura
La Junta de Andalucía asegura que mantiene su “compromiso firme” con la puesta en funcionamiento del tranvía de Jaén. En este sentido, la Consejería de Fomento aclara que está dispuesta a ayudar al Ayuntamiento a sufragar los gastos de la puesta al día de esta infraestructura, derivados de que el sistema tranviario está parado desde el año 2011. Eso sí, el departamento que dirige Felipe López matiza, en un comunicado, que no asumirá el coste total de las reparaciones necesarias. “Esta cooperación de la Justa en la puesta en óptimo estado de la infraestructura, al igual que en Vélez Málaga, sería también computada posteriormente a través del pago del déficit de explotación que tendría que asumir a largo plazo la Administración autonómica”, afirma, literalmente, el comunicado.
Con el comunicado, la Junta de Andalucía quiere matizar las declaraciones efectuadas el miércoles por el consejero Felipe López y reitera que la Administración ayudará a sufragar el coste, pero “en ningún caso, asumirá el coste real de la puesta al día de la infraestructura, que corresponde al Ayuntamiento de la capital”.
Al mismo tiempo, la Administración autonómica asegura que ha ofrecido al Consistorio jiennense asumir los gastos de la asistencia técnica necesaria para realizar el estudio sobre la situación en la que se encuentra la infraestructura y disponer así “de la radiografía real de los trabajos que han de acometerse para su puesta en servicio en términos de seguridad”. Ese análisis también servirá para saber lo que costará arreglar los posibles desperfectos que presente el tranvía tras cinco años en vía muerta.
Fomento asegura que su predisposición para reactivar el medio de transporte es absoluta. Destaca el esfuerzo inversor realizado de más de 100 millones de euros aportados por el Gobierno Andaluz y su compromiso por participar en la financiación del 40 por ciento del déficit de explotación, “para aliviar así la carga económica de su puesta en servicio, siempre desde la consideración metropolitana de este transporte derivada de los usuarios de fuera de la capital.