La Guardia Civil investiga a tres personas por furtivismo

Los agentes sorprenden a los cazadores sin permiso en un paraje protegido del Parque Natural

12 ene 2019 / 11:09 H.

La Guardia Civil de Jaén investiga a tres hombres como presuntos autores de un delito contra la flora y la fauna silvestre, en su modalidad de caza ilegal. Los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza del puesto de La Puerta los sorprendieron mientras, presuntamente, furtiveaban en un paraje protegido del interior del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. Les decomisaron un rifle con mira telescópica, cartuchos metálicos y mil euros en metálico, que llevaban en el interior del maletero de un coche. Carecían de cualquier permiso o licencia para ejercer la actividad cinegética, tal y como explica la Comandancia de Jaén en un comunicado. Los tres investigados son dos vecinos de Granada, de 35 y 60 años, y un vecino de Madrid, de 61. Se les imputa un delito contra la flora y la fauna.

Los hechos se produjeron hace unos días, cuando los agentes del Seprona y guardas de la Agencia de Medio Ambiente e Andalucía, observaron que un vehículo todoterreno se encontraba estacionado “de manera estratégica” para ocultarse y evitar su localización. Esto llevó a sospechar que sus ocupantes pudieran estar cazando ilegalmente en un espacio protegido del Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas.

Aprovechando que la orografía del terreno facilitaba su visibilidad y auxiliados de prismáticos, los guardias civiles localizaron a tres personas a las que se observó claramente mientras estaban cazando. Los agentes esperaron cuatro horas a que regresaran al vehículo, tras esperar a que introdujeran sus mochilas y un rifle en el maletero. Una vez que los interceptaron, les pidieron la documentación y comprobaron que carecían de permiso para cazar en ese lugar. Del mismo modo, encontraron el arma, la munición y el dinero. La Guardia Civil remitió las diligencias al Juzgado de Instrucción número 2 de Villacarrillo. El caso también se puso en conocimiento de la Delegación de Medio Ambiente de Jaén.

Esta actuación se enmarca en el dispositivo especial contra el furtivismo que, cada año, pone en marcha la Comandancia de Jaén, con la colaboración de la Guardia Civil de las provincias limítrofes.

Desde septiembre hasta marzo, unos 380 agentes “peinan” los montes, sierras y cotos de Jaén para tratar de acabar con los que cazan y roban desmogues al margen de la ley. Es una batalla que se libra directamente en el campo, donde actúan los furtivos, y que cuenta con todos los medios humanos y materiales, desde motocicletas hasta embarcaciones para surcar los pantanos y embalses jiennenses. Incluso, se llegan a utilizar cámaras térmicas, que detectan la temperatura de los ilegales que se cubren con la oscuridad de la noche, vehículos camuflados y hasta un helicóptero.

Año tras años, los resultados han sido, desde luego, espectaculares. En la pasada campaña, los agentes realizaron unos 770 servicios desplegados por toda la provincia. Fueron investigadas siete personas por delitos contra la fauna y la flora, relacionados con la caza ilegal, los daños en cotos, el robo y la tenencia ilícita de armas. Los agentes retiraron del campo decenas de jaulas trampa, cepos y otros medios de caza indiscriminada y que están prohibidas por la normativa vigente. También se formularon 36 denuncias por infracciones administrativas, la mayoría relacionadas con la sanidad animal.