La casa de las luces encendidas
Los vecinos de Cerro Molina denuncian que una vivienda tiene luz de noche y de día sin contadores ni enganches
Es un casa que siempre tiene las luces encendidas, pese a que allí no vive nadie. Cuando cae la noche, los vecinos la miran con la completa seguridad de que se encuentra vacía, pese a que las luces del porche iluminan su entrada y otras bombillas hacen lo mismo en otras estancias interiores. Está en la zona residencial de Cerro Molina. Concretamente, es el número 16 de la calle Vandelvira. Sin embargo, lo sorprendente y extraordinario no es que tenga flujo eléctrico, pese a que no cuente con moradores. Lo extraño es que tiene electricidad pese a que no tiene contador, carece de enganche y no está dada de alta en ninguna compañía suministradora.
Los vecinos cuentan que allí vivía una familia. Explican que el hombre murió, mientras que la mujer dejó la casa, que acabó en las manos de una entidad financiera. El banco ahora la ha puesto a la venta. Cuando se busca en los portales inmobiliarios de internet, se encuentra muy rápido. Se promociona como una “oportunidad bancaria” y se vende por 172.000 euros. Además, el anuncio aclara que la entidad de crédito propietaria está dispuesta a ofrecer el 100% de la financiación a la familia que se la quede.
Sin embargo, hasta ahora, espera vacía a que alguien se decida a dar el paso. Eso sí, con las luces encendidas durante el día y la noche. “He contactado con la compañía suministradora y también con los propietarios para que revisen esta situación. A los vecinos nos parece muy extraño que esta vivienda tenga la luz encendida por el día y por la noche y que no esté dada de alta en ninguna compañía y que carezca de contador”, afirma Daniel Ordóñez Cruz, un vecino de la urbanización. Además, no se trata de una situación excepcional, sino que esta vivienda lleva así, más o menos, desde el pasado verano.
¿Suceso paranormal?. Si no hay enganche, no hay contador, ni existe compañía que suministre y cobre la energía, bien podría parecer que se trata de un suceso paranormal. En cambio, la razón lleva a pensar que pudiera haber otra causa que explicara este hecho. Cuando la familia propietaria abandonó este inmueble y pasó a manos de la entidad financiera, estuvo un tiempo vacío. En cambio, hubo personas que se percataron de la situación —una casa vacía por una posible ejecución de la hipoteca que hacía que cayera en manos del banco— y decidieron ocuparla “por las bravas”.
Los residentes narran que una familia okupa entró en este inmueble y que estuvo un tiempo haciendo vida allí. Entraban, salían y gestionaban la casa como si fuera suya. Tenían suministro eléctrico y también de agua. Sin embargo, de buenas a primeras, se marcharon y la dejaron, otra vez, vacía, pero con las luces encendidas. El número 16 de la calle Vandelvira no tiene enganche legal u oficial, pero, si no se cree en los fantasmas, parece claro que el suministro eléctrico lo tiene que coger de algún lugar. Por eso, los vecinos creen que pudiera estar enganchada a algún lugar de una manera irregular, bien a la red general, por lo que tomaría la electricidad sin pagarla, o, puede ser también, a la propia acometida de otro residente de la calle o de la urbanización.
Algunos residentes de Cerro Molina insisten en que se trata de una situación que se tiene que mirar. Enumeran muchos motivos para hacerlo: que es una lástima que se gaste la energía en nada, que puede ser un enganche peligroso o que podría estar ligado al contador de otro residente, entre otros. En cambio, por el momento, no han obtenido respuesta. Mientras, la casa, cada noche, espera con las luces encendidas para ver si alguien resuelve este misterio, que parece más cosa de pícaros que de fantasmas.
Hace unos días, una familia que había perdido su vivienda en esta urbanización decidió tomar otra vez su inmueble. Actualmente, se encuentra en manos del banco, pero han optado por acceder a la que fue su casa otra vez e intentar negociar las condiciones. Hasta entonces, el inmueble también había pasado a manos de unos okupas que se habían enterado de que existía una casa vacía en manos de una entidad de crédito.
Cerro Molina mantiene la reivindicación de conseguir el alumbrado público en sus calles. Se trata de una zona residencial de la capital jiennense que cuenta con buena parte de los servicios, pero que todavía no dispone de luz en sus calles. Tiene más residentes durante la primavera y, sobre todo, en el verano, aunque cada vez hay más vecinos de la capital que establecen allí su domicilio habitual.