Tres años en la prisión para los “ladronzuelos” del campo

Se trata de una de las novedades del texto aprobado por las Cortes Generales y ratificado por el Gobierno de España, que pretende atajar uno de los grandes problemas que sufren los agricultores. Precisamente, Jaén es una de las provincias que sufre más saqueos en el campo debido a que la mayor parte de su actividad económica y, consecuentemente, su riqueza está fuera de los pueblos. En los últimos tres meses, los agricultores jiennenses han acudido a los cuarteles de la Guardia Civil de la provincia para denunciar alrededor de 200 robos —así lo denominan ellos—, aunque cuando pisaban los tribunales se quedaban en hurtos. De hecho, existe la sensación de que robar en el campo goza de una cierta inmunidad, que es lo que pretende atajar el Gobierno.

Por eso, un “ladronzuelo” del campo —una persona que se apropia de género de los demás de manera habitual— se puede enfrentar hasta a tres años de prisión. De hecho, el cambio de tipificación hace que los hurtos se consideren delitos leves en vez de faltas. Además, agrava considerablemente la receptación o la multirreincidencia, por lo que también se castigará con dureza a los “listillos” que compran material robado para ahorrarse unos euros. El hurto agravado se sanciona con una pena de entre uno y tres años de prisión, por lo que se empieza a castigar con fuerza a las personas que se llevan los productos agrarios o ganaderos o los instrumentos que se usan para conseguirlos. Los mismos castigos se pueden aplicar para las personas que reciben la mercancía que otros se llevan.

Agricultores cansados

Precisamente, tal y como publicó Diario JAÉN durante el pasado mes de diciembre, los agricultores estaban cansados de acudir a denunciar hurtos a los cuarteles. En plena campaña de la aceituna “desaparecían” las varas mecánicas, los lienzos y hasta hubo un caso en la carretera de Fuerte del Rey en que los jornaleros se quedaron sin comer porque los “amigos de lo ajeno” se llevaron las talegas. Asaja y COAG, por medio de comunicados, destacan que los agricultores necesitan protección y amparo legal. De hecho, muchos de los productores se quejaban de que hace mucho daño el robo, pero también la paralización que conlleva dentro de la actividad. Olivareros jiennenses han denunciado la sustracción de material eléctrico, de piezas de cobre, de maquinaria y hasta de gomas para el regadío.

Por eso, Asaja recalca, en una nota, que esta nueva norma coincide con las reivindicaciones que planteaba para exigir más protección. El Partido Popular —en otro comunicado— “celebra” la reforma y destaca que endurece los castigos para los delitos que se cometen en el campo. “Permitirá que agricultores y ganaderos jiennenses se vean menos perjudicados”, afirma la senadora Catalina García en una nota. Además, agradece la labor de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad para que la situación “esté controlada” y detener o disuadir a los “amigos de lo ajeno”.