UPyD sucumbe ante la “ola de cambio” y cierra su sede
La ola de cambio que ha sacudido al bipartidismo en la capital y ha apeado a IU del Ayuntamiento se ha llevado por delante a UPyD. Tras 7 años de trabajo en la ciudad, el partido, a cuyo liderazgo renunció, el domingo por la noche, Rosa Díez, al perder toda representación autonómica (excepto en el País Vasco, donde no se celebraron elecciones regionales) y reducir al mínimo la que tenía en los municipios, cierra en Jaén vencido por el fracaso absoluto que exhiben las cifras. Confirmando la tendencia que inauguraron las elecciones europeas, en 2014, y en la que ahondaron los comicios andaluces del 22 de marzo, cuando, en el conjunto de la provincia, UPyD perdió 3.327 votos respecto a 2012, en estas Locales de 2015 la formación magenta se ha dejado en el camino 1.280 sufragios en comparación con las municipales de hace 4 años. Con estos datos y conscientes de que el número de bajas se intensificará ahora, UPyD cierra su sede.
“Los afiliados estaremos en contacto a través de medios digitales y nos reuniremos en otro sitio distinto”, explicó el candidato a la Alcaldía de Jaén, Manuel Ballesteros, que, lejos de buscar culpables, barrió para casa y apuntó: “¿Que ha podido influir la dirección nacional? Por supuesto. Pero el problema es nuestro en un alto porcentaje. No hemos sido capaces de transmitir nuestro mensaje. Quizá, porque no hemos tenido los medios”. Subrayó, no obstante, que la agrupación, aun en manos de una gestora, continuará funcionando: “Nosotros seguiremos hasta el congreso extraordinario que se celebrará en julio para ver quiénes son los candidatos. Presentaremos lista al consejo de dirección nacional”.
Pero el número uno de la lista de UPyD, el hombre que decidió que había que “morir con las botas puestas” ante ese huracán que, en marzo, golpeó las galeras del partido, augurando el naufragio actual, se retirará de la primera línea política después del congreso. “Me voy a centrar en mi trabajo y en la familia. Está claro que nuestro partido aquí no es muy útil”, dijo, manifiestamente “desilusionado” por los resultados. “Hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos. Hemos trabajado todos estos años con la cabeza muy alta y han salido ganando el márquetin, la corrupción y la falta de transparencia”. ¿A quién se refiere? Prefirió no contestar. Solo reflexionó: “Vamos a tener un gobierno muy complicado estos cuatro próximos años, pero el pueblo ha elegido libre y democráticamente”.