Inspecciones para que no se pacte el precio del aceite

El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente quiere ponerle el “cascabel al gato”.

17 abr 2015 / 10:11 H.

Precisamente, las cooperativas y las almazaras, a través de sus organizaciones empresariales, no paran de quejarse y de pedir colaboración para que no se firmen contratos “a resultas” o, dicho de otro modo, con un precio pactado que, a la par, no se conoce. El sistema es sencillo. Un gran distribuidor acude a la fábrica y se compromete a comprar una cantidad de zumo de aceituna. Sin embargo, no le pone valor a la tonelada, sino que le dice a los que se la venden que les pagará conforme evolucione el precio del aceite.

Si retira en abril, abona el valor medio del producto en ese mes. Si lo hace en mayo, igual. A priori, suena bien porque el distribuidor se garantiza la cantidad y los productores dan por vendido el aceite a un valor que será el que esté en el mercado, ya que se actualiza cada vez que se retire una cisterna. En cambio, esta fórmula está “envenenada” y, a la larga, perjudica a los agricultores. Se debe a que los distribuidores se garantizan el producto, por lo que no salen a operar al mercado, por lo que el precio comienza a caer porque la demanda cae. Y así el precio medio baja por la falta de actividad entre los operadores.

Las medidas. El director de la Agencia de Información y Control Alimentarios, José Miguel Herrero, afirma que la nueva ley garantiza que los agricultores sepan lo que van a cobrar, ya que tiene que aparecer en el contrato. Insiste en que se busca acabar con la “venta a resultas” y evitan inseguridades. Asimismo, afirma que, hasta el momento, se han realizado 1.750 inspecciones sobre operaciones de compra y venta, de las que la mayoría se ha centrado en el aceite de oliva. “Investigamos las denuncias que se presentan y también realizamos controles si tenemos sospechas de que no se cumple la normativa”, afirma José Miguel Herrero. Además, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente señala que los controles aumentarán para evitar que una mala práctica comercial perjudique a los agricultores. También recuerda que el contrato debe incluir el precio final del producto y que no permite realizar pagos adicionales a los que se pactan por escrito.

Campoliva y el Trujal de La Loma, finalistas

El Ministerio de Agricultura ya ha dado a conocer el fallo del Premio Alimentos de España que, esta vez, no cuenta con aceites jiennenses entre los vencedores en las distintas categorías. Solo Campoliva, con su marca Melgarejo, y el Trujal de La Loma, con Cortijo Spíritu Santo, han sido finalistas en frutados verdes dulces. No hay duda de que la cosecha ha sido difícil este año, lo que también ha afectado a los caldos de excelencia. En cambio, las empresas cordobesas han tenido un “viento” mucho más favorable, lo que se ha plasmado en más premios.