Dos maltratadas denuncian por abuso al policía que las protegía

Un Juzgado de Instrucción de la capital tiene abiertas diligencias para averiguar si un policía ha abusado sexualmente de dos mujeres maltratadas cuya protección tenía encomendada. Ambas relataron por separado haber sufrido episodios que atentaban contra su libertad sexual por parte del agente, que ya ha sido apartado por la Comisaría de Jaén de su destino en la Unidad de Prevención, Atención y Protección contra los malos tratos (UPAP).

08 ene 2015 / 12:24 H.


La denuncia fue interpuesta por la Fiscalía Provincial tras tener conocimiento de los hechos denunciados, “por separado”, por las dos mujeres. Las víctimas son dos vecinas de la capital que recibían protección y escolta policial por haber sufrido violencia machista por parte de sus parejas o exparejas. Así, una de ellas acudió a una entrevista con los técnicos del Servicio de Atención a las Víctimas de Andalucía (SAVA), un organismo de asesoramiento dependiente de la Junta. A uno de los especialistas contó que había sufrido unos supuestos abusos sexuales por parte del policía que la custodiaba de su agresor. Unos hechos que se pusieron en conocimiento de la Fiscalía.
Casi de forma paralela, al Ministerio Público le llegó una segunda denuncia de otra mujer, también víctima de malos tratos y que involucraba en otro supuesto episodio de abusos al agente que la protegía. Se encendieron todas las alarmas al comprobar que el agente era el mismo. Así que la Fiscalía abrió diligencias de investigación, interrogó a las dos denunciantes y vio que su testimonio podía ser creíble. En uno de los casos, los abusos fueron “de escasa entidad”. En otro, la víctima relata “unos hechos más graves”.
Por ello, el Ministerio Público remitió todas sus pesquisas al Juzgado de Instrucción número 4 de Jaén, que se ha hecho cargo de las investigaciones. También se dio conocimiento del caso a los responsables de la Comisaría Provincial. En principio, no se adoptó medida disciplinaria alguna contra el agente en cuestión, si bien fue apartado de forma cautelar de su destino en la Unidad de Prevención, Atención y Protección contra los malos tratos, la brigada que se encarga de proteger a las víctimas de violencia doméstica que se encuentran en mayor riesgo de sufrir otra agresión.
El proceso judicial está, ahora mismo, dando sus primeros pasos. Lo normal es que la juez tome declaración a las dos denunciantes y al agente denunciado para, después, decidir si la causa sigue adelante o, simplemente, se archiva. Fuentes del entorno del policía niegan categóricamente los hechos de los que se le acusa y defienden la inocencia del funcionario, al que compañeros definen como un “agente ejemplar, un modelo”. “Se trata de una persona que se tomaba muy en serio su labor, un profesional extraordinario”, aclaran personas que han trabajado junto a él: “Era muy bueno, sino el mejor”, añaden. De hecho, el agente presenta una inmejorable hoja de servicios.
La Comisaría declinó realizar cualquier valoración oficial, por respeto a la presunción de inocencia y a la investigación judicial abierta. A partir de ahora, la Justicia tiene la última palabra.