Una constructora jiennense adquiere la "Casa del Reloj"
Hay un rayo de luz para la Casa de las Heras, popularmente conocida como la Casa del Reloj. El edificio, uno de los más representativos de la arquitectura de la capital, empieza la cuenta atrás para una merecida rehabilitación. Una constructora jiennense adquirió ayer, oficialmente, un inmueble seriamente dañado por el paso del tiempo y, sobre todo, por las inclemencias meteorológicas. De esta forma, su recuperación y conservación están más cerca que nunca.
Construcción Calderón, a través de la empresa DBJ Calderón, firmó ayer las escrituras de compra-venta. Según pudo conocer este periódico, la firma empresarial, en la que participan los arquitectos Eduardo Duro y Germán Bonilla, entre otros, consiguió quedarse también con cinco plantas más de dos edificios colindantes cuya fachada da a la Plaza de Santa María.
Por el momento, la nueva propietaria de la Casa del Reloj prefiere guardar silencio. El mutismo es absoluto, de igual forma, entre quienes forman parte de esa sociedad creada para hacerse con el inmueble. Lo que trasciende es que uno de los objetivos de la operación inmobiliaria es recuperar el considerado como uno de los máximos exponentes modernistas de la ciudad. Ahora bien, se desconoce si el interior se reservará para oficinas o apartamentos. Serán los técnicos los que, en los próximos días, empiecen a trabajar sobre el terreno para diseñar el proyecto que mejor se ajuste a las condiciones constructivas. Las fuentes consultadas garantizan que la Casa de las Heras está en las mejores manos y que no hay dudas respecto a la conservación y recuperación para la ciudad de una arquitectura perfectamente protegida.
Enclavada en el conjunto histórico de la capital, justo en la esquina de la Plaza de Santa María con la calle Maestra, la Casa del Reloj fue construida en 1906. La planta baja estuvo destinada a superficie comercial y la superior sirvió de vivienda. La ciudadanía exige su arreglo.