Los talleres se movilizarán contra los mecánicos ilegales

Los talleres de reparación de vehículos y los instaladores están hartos. Llevan tres reuniones en su organización empresarial —la Federación de Empresarios del Metal— y se preparan para movilizarse. Consideran que sufren una “ola” de negocios ilegales que hacen labores parecidas a ellos —señalan que no con su nivel de profesionalidad—, pero que como no pagan impuestos ofrecen precios más competitivos, lo que constituye una auténtica competencia irregular muy lesiva.

29 ago 2014 / 09:14 H.


La Federación del Metal estima que el 25% de los arreglos de coches en la capital o en la provincia los hacen personas que están al margen de la normativa legal. Si se mira al sector de los instaladores, el panorama aún es peor. En ese caso, calcula que la mitad de los aires acondicionados, sistemas de electricidad, instalaciones de gas y otras labores no las hacen las empresas legalmente constituidas, sino irregulares. Por eso, estos empresarios afirman que el 40% del dinero del sector de la automoción y de los instaladores se mueve al margen de la ley, por lo que pasa de unas manos a otras sin que existan contratos de trabajo o pago de las obligaciones a la Agencia Tributaria. “Es una auténtica vergüenza porque siempre pagan los de siempre. Además, los empresarios tienen la sensación de que existe una especie de amnistía o impunidad porque ven que las administraciones no hacen nada”, afirma el secretario de la Federación, Ramón Catalayud.

Se da la paradoja de que este sector contó con muchos trabajadores, sobre todo en lo que a instaladores se refiere, con el auge de la construcción. En cambio, la situación de la obra es bien diferente ahora, por lo que muchos de estos negocios se han quedado solo con el propietario y, en algunos casos, con otro operario. Esto ha hecho que un importante grupo de extrabajadores hayan caído en el paro. Y muchos no se han logrado recolocar, por lo que se “buscan la vida” con chapuzas al margen de la normativa.

movilizaciones. Ramón Calatayud asegura que las empresas barajan un cierre patronal en otoño para dar la voz de alerta. “Nos hemos reunido con la Policía Autonómica y con el Seprona, que han abierto actas. En cambio, los expedientes tardan mucho cuando entran en la Administración, por lo que los irregulares siguen con su actividad. Realmente, los que tienen mucho que decir son los ayuntamientos, que sí tienen potestad para cerrar con un negocio irregular, pero vemos que no lo hacen”, explica el secretario general de estos empresarios.
La Federación recalca que 6.000 negocios y 14.000 empleos que cumplen con sus obligaciones laborales y tributarias están en peligro si no se toman medidas. Por eso, también se contempla comenzar con una recogida de firmas en los propios talleres dentro de una campaña para protestar contra esta competencia irregular. No quieren acabar con las chapuzas, pero sí que las personas que las hacen paguen como empresa o como trabajador autónomo para competir en igualdad de condiciones con el resto.

Este fenómeno no es exclusivo de Jaén. Pasa en cualquier lugar de España. De hecho, la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam) asegura que los talleres ilegales generan un fraude fiscal a la Hacienda Pública de 230 millones de euros anuales derivados no sólo del impago del IVA —que no le cobran al cliente final— sino también de la evasión de los impuestos derivados de su propia actividad, como son los tributos de Sociedades e IRPF, según sus cifras. Por eso, parece que los empresarios están dispuestos a movilizarse. Afirman que sus negocios están en peligro.