El precio de los coches usados se dispara por la alta demanda

La crisis se hizo notar, desde sus primeros pasos, en la venta de vehículos y, 8 años después, el mercado del nuevo y usado es un termómetro de la situación que atraviesan empresas y familias. La Federación de Asociaciones de Automóviles a Motor Faconauto destaca una “falta de stock” de vehículos de segundo uso, ante el enorme incremento de la demanda.

20 jul 2014 / 22:00 H.

La gestora Audatex habla de un aumento de 10 puntos porcentuales en el precio de los utilitarios de segunda mano con respecto a los niveles de 2011. El Grupo Ávolo, que opera en Jaén, confirma, a través de su propia experiencia, ambas tendencias.

Se debe, en gran medida, a que muchos ciudadanos de a pie no pueden permitirse cambiar de vehículo y dilatan la vida de sus coches hasta el final definitivo. Es lo que refleja el estudio “Impacto de la crisis” del Observatorio Español de Conductores, que apunta que el 84 por ciento de los conductores no tiene intención de cambiar en el próximo año, el 28,5 por ciento de los cuales no lo hará porque no puede permitírselo. Lo mismo ocurre con las empresas y los centros de “renting”, según Óscar Arévalo, del Grupo Ávolo. Esto hace que sea mucho más complicado encontrar vehículos de segunda mano que ofrecer a aquellos que se han quedado sin el suyo y, por consiguiente, el incremento del precio de los mismos. Para Arévalo, que además de dispensar nuevos cuenta con un centro de ocasión, el estudio de Audatex incluso se queda corto.

“El precio de los vehículos con 3 o 4 años ha subido tanto que en ocasiones hay una diferencia de 3.000 o 4.000 euros con respecto a uno nuevo, y en esos casos comprar de segunda mano deja de tener sentido”, expresa el profesional. Conoce con claridad a qué se debe: “Las empresas de alquiler de coches los aprovechan más, han bajado los vehículos de empresa vía ‘renting’ y cuando llegamos a las subastas de financieras y de ‘renting’ nos damos cuenta de que casi no hay vehículos por los que pujar”, relata.

Centros como el suyo tienen que lidiar, además, con un elevado incremento de la demanda. Arévalo calcula que el tráfico por su exposición de usados ha aumentado en torno a un 25 por ciento. Muchas de estas personas buscan utilitarios muy baratos, algo que les sirva para su día a día. “Cuando creíamos que un coche había agotado su vida útil, resulta que se vende. Si no se acoge a un Plan PIVE puede tener hasta una tercera o cuarta vida”, expresa, aunque apunta que, a pesar de esta demanda, operadores como el suyo son reticentes a vender vehículos con 13 o 14 años, “por muy bien que estén”, porque no se puede garantizar su seguridad y buen estado.

Según Audatex, el mercado de ocasión se ha constituido como una alternativa al nuevo, ya que se adapta al poder adquisitivo de la mayoría de los españoles, cuyo salario habitual es de 16.500 euros brutos anuales, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). De media, un coche usado representa el 77% de la renta de muchos españoles, frente al 150% de uno nuevo. Algo que podría dejar de ser así si continúa la tendencia