Inquietud en el olivar por la mala cosecha que se avecina

Los olivareros no están demasiado contentos por la cosecha que se avecina. Algo falla con respecto a las previsiones iniciales. En principio hay menos aceituna de lo que se preveía. Tenían claro que no iba a ser una campaña récord como la pasada, pero lo que ahora les inquieta es que pueda ser como la de hace dos años, algo que resumen en una palabra: “desastrosa”.
La recolección será menor. La Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) de Jaén ya dio su primera visión. Su portavoz, Luis Carlos Valero, afirmó que los datos que maneja la organización auguran “una cosecha mucho más corta de lo que en principio apuntaba la floración en primavera”. Eso sí, consideró que “habrá que esperar a septiembre u octubre”, que es cuando la Consejería de Agricultura realiza los aforos oficiales.

12 jul 2014 / 22:00 H.


Además, “a priori” parece que esa falta de fruto es irregular según las zonas. “En muchos lugares de menor altitud de la provincia, donde la floración venía más adelantada, al igual que ocurre en todo el valle del Guadalquivir, la cosecha va a ser prácticamente nula, por la caída del poco fruto que quedó tras la floración. Esto se debe a varias circunstancias, como manifestó Valero. Entre ellas, el agotamiento del árbol, “cansado” de la alta cosecha que soportó la temporada anterior, y de la falta de precipitaciones durante un periodo clave como es la primavera. Asimismo, según añadió el portavoz de la Asaja, en las zonas más altas “parece ser que mejoran algo más las condiciones de mantenimiento de fruto”, aunque de forma irregular.
malas previsiones. La ingeniera agrónoma Francisca Gutiérrez también es pesimista con respecto a la próxima campaña olivarera. Malas noticias les esperan a los olivareros en particular y a la provincia, en general. “Si no hay apenas aceituna, es una ruina para todos”. Gutiérrez habla claro y, según ha podido comprobar, hay lugares en los que apenas se ve fruto y, por lo tanto, “no merecerá la pena” ni siquiera asomar por el campo. “En algunas fincas de Torredelcampo, Mancha Real o incluso Jaén capital habrá muy poca cosecha”, consideró, según las primeras estimaciones. También es de las que opina que la temporada podrá ser tan pésima como la de hace dos años y, si acaso, algo mejor, pero solo unos puntos. “Campañas de este tipo, hace cuatro o cinco décadas hubiesen significado un año de hambruna para la provincia”, afirmó.
Pero, ¿por qué habrá poca aceituna? Según la especialista, se dan diversos condicionantes. “Un año en que un árbol está muy cargado, al siguiente está menos”, dijo. A ello se le suman las condiciones meteorológicas, como la lluvia o la temperatura. “El olivo necesita horas de frío en el invierno, que es lo que se llama el proceso de vernalización. Antes de la floración también es importante la lluvia. Hay tres o cuatro momentos claves para el olivo”, apuntó, para recalcar la importancia de la “prefloración” y la floración. “En algunas zonas hubo temperaturas muy altas y, además, hubo olivares que, como hubo tanta aceituna, se cogieron tarde y otros tempranos. Al final, se une todo, porque al olivo, como se dice popularmente, no le da tiempo a descansar”, comentó. Aparte de las condiciones ambientales e internas, con las que no se puede hacer nada, están las “prácticas culturales”, las labores del campo. “En eso, los agricultores jiennenses tienen un sobresaliente”, dijo, para concluir que, sin embargo, contra la naturaleza, nadie puede “luchar”.