“Harto” de humedades por el estado de un solar

Harto” de humedades y de ratas por el abandono del solar que estás junto a su casa. Así se encuentra Antonio López, vecino del barrio de San Juan, quien asegura que la situación “ya es insostenible”, por la existencia de unos terrenos sin desbrozar y los riesgos que supone para su vivienda.

Calle San Blas. Una vía urbana estrecha y “escondida” entre los callejones. A simple vista no hay nada fuera de lo normal, hasta topar con dos edificios que se encuentran “sellados”, los números 9 y 11, ante su estado de ruina. “Tuvieron que tapiar las ventanas, porque se metieron okupas”, afirma Antonio López, que abre la puerta de su casa con cierta indignación. Rápidamente, corre la puerta del salón y muestra la gran mancha de humedad que cubre la habitación. “Hace menos de un mes que la pinté y así está otra vez”, critica, y achaca los males de su vivienda a la existencia de un solar lleno de hierbajos y tierra. “El agua se acumula ahí y se filtra a mi casa”, explica. Sube las escaleras de la vivienda y llega a la azotea. Enseña el solar, que desde la calle apenas se ve. “Hay todo tipo de broza, está así desde hace décadas y nadie hace nada”, dice. De ahí, el afectado se desplaza hasta la cocina, una de las habitaciones que más sufre la situación. Mientras su mujer prepara la comida comenta, que entran las ratas y campan a sus anchas. “Yo lo tapo todo, porque me da de todo ver un roedor”, indica. “Me acabo de gastar más de doscientos euros en arreglar la luz, después de estar sin electricidad tres días, porque la instalación recibía agua de la humedad”, explica el denunciante, que pide que el solar se acondicione y se le adecúe con desagües de agua. “Yo llevo más de sesenta años en esta casa, que era de mis padres, y no tengo por qué estar así, por los problemas de las casas en ruinas colindantes”, justificó la mujer.

Del mismo modo, la presidenta de la Asociación de Vecinos Torre del Concejo, Mari Ángeles Barranco, explicó que ya han solicitado a la administración local que tome cartas en el asunto. “Los vecinos tienen que soportar que los roedores se paseen por las puertas por la acumulación de escombros en el solar que está escondido a los viandantes, pero que está ahí y que hay que cuidar, porque hay vecinos alrededor”, explicó Barranco. Asimismo el propio concejal de Participación Ciudadana, Manuel Heras, visitó esta misma semana, el barrio y mostró su predisposición para tratar de solucionar el problema. “Esperemos que esto sea así y podamos vivir tranquilos”, concluye López.