¿Es uno de los acusados de la violación grupal del portal?

La defensa dice que la imagen es de su cliente, lo que le da coartada

31 may 2019 / 09:51 H.

Son las cinco y un minuto de la tarde del 2 de marzo de 2018. A esa hora, las cámaras de la estación de autobuses de Jaén captan la imagen de un joven. Es la figura de un adolescente delgado, con cazadora oscura y zapatillas blancas. Es una sombra sin cara, un “fantasma” al que es imposible distinguir el rostro con nitidez. La Audiencia debe decidir si esa silueta pertenece a Manuel, el adolescente de 16 años condenado de ser uno de los participantes en la violación en grupo de una chica en un portal del Paseo de la Estación por parte de cinco varones. Esa grabación es crucial para el caso de la “manada de Jaén”. ¿Por qué? La defensa de Manuel, ejercida por el abogado Jorge Machuca, trata de demostrar que su cliente estaba a punto de tomar un autobús hacia Bailén poco antes de que se produjera la agresión sexual, que se registró sobre las seis menos veinte de la tarde. Si la coartada se verifica, podría suponer un vuelco en este caso, que hasta ahora está basado prácticamente en el testimonio de la víctima: la chica siempre identificó sin duda a los cinco implicados como las personas que la atacaron en el portal aquella tarde.

La grabación de la estación de autobuses se aportó ayer como prueba en la vista celebrada en la Audiencia Provincial. La Sección Segunda estudió el recurso presentado por las defensas de los tres adolescentes condenados por el Juzgado de Menores el pasado mes de febrero a penas que oscilan entre los cinco y los dos años y medio de internamiento. La Fiscalía asegura que esas imágenes no aportan nada. El Ministerio Público considera que es imposible distinguir el rostro de la persona que camina entra al recinto por la Plaza Coca de la Piñera, acude a la taquilla para comprar un billete, camina entre los andenes y se fuma un cigarrillo en un banco, mientras espera el autobús, que salió hacia Bailén a las cinco y media.

No obstante, su abogado considera que la grabación es “un indicio muy fuerte” de su inocencia. Al respecto, el letrado aportó varios argumentos: el primero es la vestimenta, sobre todo la cazadora, que “es parecida” a la que Manuel llevaba puesta el día que fue detenido. El segundo lo que parece es el corte de pelo. El menor condenado posee un flequillo muy característico, con mechas rubias. El letrado asegura que la figura que se ve en la grabación también lo tiene. Y el tercero es que la complexión física y la forma de caminar son muy similares a las de su cliente. Por todo ello, pidió al tribunal que revoque la condena y que Manuel sea absuelto.

La decisión puede afectar a los otros cuatro acusados. Hay que recordar que la adolescente fue agredida sexualmente en el interior de un portal del Paseo de la Estación por cinco hombres. Dos de los supuestos asaltantes eran mayores de edad y están en prisión a la espera de juicio, que se celebrará en los primeros días de julio. Los otros tres, los que aún no habían cumplido los 18 años cuando sucedieron los hechos, fueron declarados culpables y condenados el pasado mes de marzo a penas de internamiento. No obstante, siempre han defendido su inocencia y presentaron coartadas, que no fueron tenidas en cuenta en el primer juicio por el Juzgado de Menores. Juan, de 17 años, mantuvo que se encontraba en un gimnasio de Bujalance. Su defensa llegó a presentar varias fotos en las que se le ve haciendo pesas en esa instalación. No obstante, la magistrada creyó que esas imágenes no eran concluyentes, porque podían estar manipuladas y se aportaron mucho después del arresto del menor.

José —primo hermano del anterior de 16 años— aseguró que pasó buena parte de la tarde en un pub del polígono y que, después, se fue al culto con unos amigos. Sin embargo, nada ni nadie ratificó su versión. Las cámaras del local no captaron su imagen ni ninguna persona lo vio allí.

La coartada de Manuel, el tercero de los procesados, se basaba en decir que estaba de viaje desde Jaén a Bailén para pasar el fin de semana con unos familiares. Explicó que viajó en autobús. Sin embargo, esos parientes no supieron concretar a qué hora llegó a su destino. Tampoco pudo aportar como prueba el billete del autocar. Su abogado, Jorge Machuca, llegó a solicitar hasta en siete ocasiones las grabaciones de las cámaras de seguridad de la Estación del día de los hechos. Esa prueba nunca se pudo practicar “por problemas informáticos y técnicos”. La juez de Menores, además, consideró que no era necesario. No obstante, el letrado volvió a pedir el visionado de las imágenes la semana pasada y la Audiencia, finalmente, lo concedió. Esas fotos se vieron ayer: ¿Esa silueta pertenece a Manuel?